Gonzalo Gortázar, consejero delegado de Caixabank, ha recordado la importancia de contar con un entorno de seguridad jurídica tras las últimas decisiones adoptadas por el Gobierno, intervencionistas en mercados como el energético o el de la vivienda. “A veces, se nos olvida que España depende mucho del capital extranjero; pero sólo tenemos que recordar lo sucedido en la anterior crisis”, ha apuntado, tras afirmar que “todos deseamos tener más seguridad jurídica”.
En las últimas semanas, los inversores internacionales han llamado la atención sobre los cambios normativos del Gobierno para tratar de rebajar el impacto de la subida de la electricidad en el recibo, así como las negociaciones entre los socios de la coalición para regular el mercado del alquiler que, finalmente, han cristalizado en un acuerdo.
Apoyo exterior crítico
“Cualquier medida que se tome tiene que tener en cuenta la seguridad jurídica, aunque sea por egoísmo, porque el apoyo de la inversión extranjera es crítico”, ha declarado Gortázar durante su intervención en un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum. El ejecutivo ha insistido en que el refuerzo que la economía española ha tenido durante la crisis del coronavirus por parte de la Comisión Europea (con los fondos Next Generation) y el Banco Central Europeo (con las medidas de estímulo, en especial la compra de deuda) no durarán eternamente.
No obstante, Gortázar no se ha pronunciado específicamente sobre la última medida aprobada por Moncloa, la nueva Ley que regulará el mercado del alquiler, y que afecta específicamente a Caixabank. “Aún es muy pronto para valorar la norma porque no conocemos los detalles”, ha apuntado aunque también se ha encargado de recordar que la entidad tiene 24.000 viviendas en cartera, de las que más de 16.000 “tienen carácter social, con rentas muy bajas; llevamos mucho tiempo trabajando para facilitar el acceso a la vivienda”.
Mayor productividad
Al margen de estas medidas concretas, el consejero delegado de Caixabank se ha mostrado optimista sobre la recuperación económica. Con todo, ha recordado que la salida de la crisis pasa “porque seamos todos más productivos”.
En este sentido, Gortázar se ha mostrado convencido de que a finales de 2022 la economía española habrá recuperado el PIB de 2019, el año anterior a la pandemia pero “con 300.000 millones de euros más de deuda pública”. Una situación de la que ha exculpado al Estado (“ha hecho lo que tenía que hacer”) pero que ha instado a atajar cuanto antes para evitar “que se convierta en una pesada carga”.
Más competencia que nunca
En cuanto al sector financiero, Gortázar no ha ocultado la incertidumbre que genera la competencia que llega desde las grandes compañías tecnológicas. “¡Claro que tememos a las grandes tecnológicas! Forma parte de nuestro trabajo estar vigilantes ante esta situación, pese a que estamos seguros de tener un modelo de negocio ganador”.
El ejecutivo ha hecho hincapié en que “la competencia en el sector financiero es mayor que nunca, aunque haya menos entidades, por la entrada de nuevos jugadores, los cuales se hacen fuertes en las áreas que más beneficios dan”. En este sentido, no descarta que haya mas fusiones como la protagonizada por Caixabank con Bankia. “Igual que nosotros hemos optado por ese camino por haber encontrado el socio adecuado, otros pueden hacerlo; pero no es el único para afrontar los desafíos”.
Desafíos que pasan por la permanencia en el tiempo de los tipos de interés negativos, a cuyo fin no se ha atrevido a poner fecha. “Por primera vez en mucho tiempo, los mercados ponen ya el Euribor en positivo para 2024, pero tengo muchas dudas porque aún hay muchos nubarrones”.