Eurofragance, dedicada al diseño, fabricación y venta de fragancias para otras empresas, cerró el ejercicio del año de la pandemia con unas ventas de 78 millones de euros. Tras una facturación récord de 90 millones en 2019, la cifra del mismo período del año 2020 supone una caída del 13%.
A pesar del impacto de la crisis del coronavirus, la compañía catalana de fragancias prevé terminar este año con una facturación de 94 millones de euros, es decir, un crecimiento del 20%.
Impacto “poco significativo”
A pesar de la caída de los beneficios, el consejero delegado de la firma, Laurent Mercier, ha explicado a Efe que el impacto del Covid-19 ha sido “poco significativo” en las ventas. Esto mismo destacó la directora de Márketing y Comunicación de la compañía, Stéphanie Marze, en una conversación con Crónica Global, en la que subrayó que el golpe de esta crisis fue “la mitad que para el resto” de los competidores del sector por las especificidades de su negocio.
Para Mercier, el descenso de las ventas en 2020 se debe al retroceso sufrido por la categoría de perfumería fina con el virus, principalmente en el segundo trimestre del año pasado, aunque la empresa no tuvo que parar la producción en ningún momento.
Rápida recuperación
Aun así, la pandemia ha retrasado en un año las previsiones de Eurofragance de llegar a los 94 millones de euros de facturación que, en un principio, se pensaban alcanzar en 2020. Ahora, dadas las consecuencias que han sufrido algunos de sus mercados clave, como Indonesia, Filipinas, Kuwait y Arabia Saudí, se prevé llegar a dicha cifra este 2021.
Esta previsión se ve reforzada por la rápida recuperación registrada en los dos últimos trimestres del año pasado y el primer trimestre de este, pues la compañía asegura que ya ha superado los niveles y resultados preCovid. Según Mercier, esto refleja la “solidez del plan estratégico” y el potencial de su red mundial, con tres plantas y ocho filiales repartidas por el mundo.