La pandemia de coronavirus tuvo un impacto devastador en el empleo en 2020 del cual el mercado laboral todavía intenta recuperarse. El resurgir de la actividad avanza a paso lento. Apenas cuatro de cada 10 empresas prevén contratar personal en este 2021, mientras que un 25% estima realizar despidos como garantía de viabilidad, en un contexto en el que la incertidumbre sobre la evolución económica a corto plazo aún no invita al optimismo.
A pesar de las buenas previsiones lanzadas desde el Gobierno, el Banco de España y la Comisión Europea, que apuntan a que durante el segundo semestre de 2021 se iniciará la recuperación de la economía española hasta alcanzar niveles prepandemia en 2022, ni las empresas ni los profesionales se muestran tan esperanzados al respecto. En su caso, dan por hecho que la recuperación no llegará en este 2021, según se desprende de los datos del XXIV Informe Infoempleo Adecco: Oferta y Demanda de Empleo en España, elaborado a partir de más de 242.000 ofertas de trabajo publicadas el pasado año y de una encuesta a empresas y autónomos y a más de 10.800 personas con y sin empleo
Temor a los rebrotes y a la falta de consumo
Del estudio se extrae que el 37,6% de las compañías piensan incluso que acabaremos el año peor que lo empezamos (el 36,5% considera que mejor, y el otro 25,9% opina que igual). Mientras que el 43,3% de los profesionales con trabajo, y el 44,4% de los desempleados, tampoco esperan una evolución positiva de las contrataciones en el ejercicio en curso.
¿Y cuáles son las previsiones en el mercado laboral más inmediatas o bien a medio plazo? Ahí reina la incertidumbre. Las empresas se muestran cautas, pues sobre todo temen que el consumo no se reactive (47%) y que se produzcan rebrotes que motiven nuevos periodos de confinamiento (41,7%). También tienen miedo a que el incremento de los costes (31,7%) y los cambios de hábitos o gustos en el cliente (29,4%) les impidan recuperarse.
Contrataciones, ERTE y despidos
A pesar de esta situación, el 39,4% de organizaciones se plantea realizar nuevas contrataciones durante 2021. Un dato alentador, pero que contrasta con otros como el hecho de que el 25,8% prevea nuevos despidos, el 23,5% recortes salariales y otro 11,1% tenga en mente solicitar entrar en ERTE o ampliarlo.
Previsiones de las empresas en 2021, según el Informe Infoempleo Adecco: Oferta y demanda de empleo en España
Esa desconfianza también está muy presente entre los trabajadores. El 47% de ellos ve posible quedarse sin empleo en 2021 por la crisis del coronavirus. Y hasta un 50% de los profesionales que buscan trabajo piensan que tienen pocas posibilidades o ninguna de encontrarlo: bien por razones de edad (29,7%), por el estado general de la economía (23,2%), por la crisis sanitaria (12,7%) o por la paralización de los procesos de selección (9,2%), entre otras razones.
En el caso de los autónomos, sus previsiones de estancamiento son aún más palpables. Así, el 93,2% de ellos no piensa contratar a nadie durante este año, ya sea porque no lo necesitan, porque su actividad está en recesión o por un exceso de costes. Apenas el 3,4% planea reclutar más personal.
Flexibilidad y semana laboral de cuatro días
En cuanto a posibles medidas para salir de la crisis, el 55% de las empresas creen que la flexibilidad horaria puede ser una de las más eficaces tanto para salir de la crisis como para mejorar su competitividad. Asimismo, el 46,4% ve con buenos ojos ofrecer la posibilidad de teletrabajar.
La pandemia también ha vuelto a despertar el interés por implementar la semana laboral de cuatro días. Incluso desde el Gobierno se propuso hace unos meses un proyecto piloto de tres años diseñado para ayudar a las empresas a llevar a cabo esta transición. Sin embargo, el 61,7% de las firmas no ve viable esta opción, debido principalmente a la falta de beneficio para mantener los salarios con mejor jornada. Algo en lo que difieren los empleados, con el 56,3% que sí lo ven posible.
La oferta de empleo se redujo un 40% en 2020
Este contexto del mercado laboral se produce después de la caída histórica de la oferta de empleo en 2020 debido a la pandemia --del 41,9% en el conjunto de España, alcanzando el 52,2% en Cataluña--, después de siete años de crecimientos continuados, y que durante los meses más duros de la crisis llegó a hundirse hasta un 70% respecto al mismo periodo de 2019.
Sobre el impacto que los meses de pandemia tuvieron en las empresas, un 70% de las compañías asegura que su actividad económica se redujo en 2020, mientras que apenas el 24,7% pudo mantener su facturación estable y solo el 5,2% afirma haber crecido.
Una terraza vacía en el centro de Barcelona. El Govern ha mantenido las medidas que afectan a bares / EFE
La situación económica que las empresas han tenido que afrontar por culpa de la pandemia estuvo detrás de cuatro de cada 10 despidos efectuados el año pasado, según el informe.
Hostelería y turismo, los más afectados
El comercio y la distribución minorista, donde se engloban supermercados y grandes almacenes, fue el sector que más ofertas de empleo generó en 2020, con el 9,5% del total, dos puntos más que en 2019. Le siguieron el sector industrial (8,2% de las ofertas, con un aumento de 2,5 puntos) y el sector sanitario, cuya oferta creció más de cinco puntos, hasta el 7,8%.
Por el contrario, la hostelería y el turismo pasaron de encabezar el ranking sectorial, con el 12,4% de la oferta total, a contar solo con el 4,8% en 2020, lo cual supuso la mayor caída, de 7,6 puntos.
Futuro
Según apunta el informe, el fin del estado de alarma el pasado 9 de mayo, la campaña de vacunación, la llegada de las primeras ayudas europeas de los fondos Next Generation EU y la reactivación del turismo harán que buena parte del futuro económico de España se decida entre julio y diciembre de este 2021.
En este sentido, el secretario general del Grupo Adecco, Santiago Soler, considera que “todas las previsiones apuntan a que el final del tercer trimestre supondrá el comienzo de la normalidad y la recuperación sostenida, cuando ya tengamos al total de la población vacunada”. Aunque también ve necesario llevar a cabo reformas, políticas activas de empleo y reforzar los sistemas de formación, entre otras medidas. "Se necesita una verdadera apuesta por la formación permanente, sin formación no va a haber transformación posible", afirmó durante la presentación del informe.
Soler también destacó la importancia de los fondos europeos, con inversiones que cree que tienen que venir acompañadas "de una enorme recapacitación de las personas".