La mayoría de afiliados de CCOO en Cataluña son federalistas y contrarios a la independencia. Esa es la conclusión de una encuesta interna elaborada por el propio sindicato a las puertas de su próximo congreso general entre el 21 y 23 de mayo.
Respecto al futuro político de Cataluña, la mayoría de entrevistados apuesta por una solución federal (40,3%), mientras que solo el 26,9% se decanta por la secesión. En último lugar queda la opción de mantener la autonomía con sus competencias actuales (21,9%). Aún así, dos tercios de los encuestados se muestran favorables a la celebración de un referéndum de autodeterminación en la comunidad.
Alineados a la izquierda
Estos datos contrastan con el barómetro elaborado por el Centre d'Estudis d'Opinió (CEO), que rebaja 12,5 puntos la preferencia por el federalismo y aúpa 8,2 puntos los partidarios de la independencia en el seno de la sociedad catalana. Estas diferencias se justifican por el mayor escoramiento a la izquierda de la afiliación en todos los tramos de edad.
Los encuestados muestran más afinidad política con En Comú Podem, ERC y PSC, por este orden. Más lejos quedan Junts per Catalunya, CUP y Cs, mientras que fuerzas como Vox, PDECaT y el PP apenas cosechan simpatías entre los sindicalistas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que un 18% de entrevistados se identifica con otras opciones políticas diferentes, hecho que el sindicato interpreta como un signo del hartazgo social por el sistema de partidos. Además, entre los menores de 30 años la insatisfacción política escala hasta el 34,5%.
Tan catalanes como españoles
El sondeo arroja otros datos interesantes. La mayoría de afiliados se siente tan catalán como español, en línea con la autoidentificación identitaria de la mayoría de ciudadanos --según el CEO, el 43,6% de catalanes expresa un sentimiento nacional mixto--. Es importante, asimismo, el porcentaje de trabajadores que no se siente concernido por la polaridad catalán-español y responde "otros" a esta pregunta.
Las propuestas que concitan un apoyo más transversal son la defensa de los servicios públicos (salud, servicios sociales y educación) --un 90% de afiliados están en contra de su privatización--, las políticas feministas y la inclusión de la población extranjera. Líneas de actuación que, según la organización laboral, refuerzan su agenda de acción sindical.