La Policía Nacional recuerda que la normativa vigente en seguridad en paquetería facilita la colaboración entre la seguridad privada de las empresas y la fuerza pública. El CNP ha respondido a este medio sobre la batería de leyes y decretos, e incluso un plan integral de colaboración, que obligan a los vigilantes a dar parte de posibles delitos a las fuerzas de seguridad.
Es la contestación de la Policía Nacional al caso GLS, líder en paquetería en España que esta semana se ha visto enmarañado en una polémica por un mensaje interno de Juan Rey, su responsable de seguridad, que pedía no detener los paquetes marcados por la unidad canina ni informar a los Mossos d'Esquadra de estos incidentes, como explicó este medio.
CNP: "Obligación de colaborar"
Tras dar cuenta Crónica Global del incidente, una portavoz del CNP ha recordado que las empresas de mensajería suelen contar con áreas de seguridad. Estas se rigen por la Ley de Seguridad Privada 5/2014, que obligaba los directores de seguridad a colaborar con las autoridades. El reglamento de seguridad privada 195/2010 también insiste en ello: hay que informar de "los hechos de los que tengan conocimiento y que puedan ser susceptibles de estar relacionados con la comisión de un presunto delito".
En el marco de los servicios postales, la seguridad está regulada por el Real Decreto 1829/99. En paralelo al armazón legal, la fuente oficial ha recordado que existe un plan de colaboración llamado Red Azul de Seguridad que rige el trabajo conjunto entre vigilantes y CNP. Funciona desde 2012, y permite la "fluidez" entre vigilantes y agentes.
ADN pide legislación más dura
Por su parte, ADN Sindical ha exigido a su vez "legislación más dura" para que la empresas cuenten con departamentos propios de seguridad, algo a lo que no están obligadas. "En sectores tan sensibles como la paquetería, no se puede confiar en la voluntad de las compañías. Hay que obligar a ello", ha conminado un portavoz de la plataforma mayoritaria.
Ambas reacciones siguen a la publicación por parte de este medio de un mensaje atribuido al responsable de GLS Spain, en el que invitaba a los vigilantes a no parar paquetes marcados como sospechosos por la unidad canina del grupo. Y, también, a no avisar a los Mossos d'Esquadra. Preguntada por ello, la firma recordó que tiene un grupo de perros detectores, algo innovador en el sector, y una política de "tolerancia cero" con los envíos ilegales.