El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, obtuvo una remuneración total de 2,325 millones de euros en 2020, un 24,5% por debajo de la correspondiente al ejercicio anterior tras haber renunciado a la retribución variable, como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
Por todos los conceptos, los componentes del consejo de administración de la entidad financiera percibieron 5,95 millones de euros, lo que supone un recorte del 12% respecto a la cifra registrada en 2019.
Bonus y dividendos
En el caso de Gortázar, la principal diferencia está relacionada con la decisión que cerca de un centenar de ejecutivos de Caixabank tomaron la pasada primavera, en plena primera oleada del Covid-19, consistente en renunciar a sus respectivas retribuciones variables.
La medida vino acompañada de recortes en la política de dividendos, en linea con las recomendaciones que por entonces ya había emitido el Banco Central Europeo (BCE) y que posteriormente se endureciueron, hasta el punto de vetar cualquier tipo de remuneración al accionista.
Sin cambios para Gual
Gortázar es el único miembro del consejo de administración de Caixabank con carácter de ejecutivo.
Por su parte, el presidente de la entidad, Jordi Gual, mantuvo la remuneración fija de 1,15 millones de euros. Se trata del último año completo en el que ejerce como presidente de Caixabank, ya que está previsto que ceda el cargo a José Ignacio Goirigolzarri cuando se culmine el proceso de fusión con Bankia.