La propietaria de Trasmediterránea frena el concurso mientras negocia un nuevo crédito

Naviera Armas, propietaria de Trasmediterránea y el mayor grupo marítimo de España, ha alcanzado un acuerdo con sus bonistas para frenar el concurso de acreedores a la espera de alcanzar un acuerdo para refinanciar la deuda. Ambas partes se han puesto como plazo hasta final de año para sellar un nuevo pacto y plantean la inyección de liquidez mediante un crédito para “superar la crisis generada por el Covid-19”.

Naviera Armas, encargada de las conexiones entre Canarias y Baleares con la Península a través de Trasmediterránea, negocia desde hace varios meses con sus acreedores una quita de la deuda de 800 millones de euros que acumula. La compañía ha acusado sobremanera la caída del tráfico de pasajeros por las restricciones sanitarias y el deterioro del turismo.

Negociación de un nuevo crédito

En un comunicado emitido este viernes, el grupo canario ha detallado que se ha logrado “un gran avance en el proceso de refinanciación de su deuda”. En concreto, se ha acordado con los bonistas, que acumulan el 72% de los bonos emitidos”, frenar el concurso de acreedores mientras se trabaja en un escenario que dé oxigeno a la compañía hasta la recuperación de la actividad.

Asimismo, las partes también negocian la aprobación de un crédito a corto plazo que proporcione liquidez a la compañía con el fin de garantizar los pagos. Según publicó El Confidencial a comienzos de noviembre, Naviera Armas ha contratado a Houlihan Lokey y a PwC para encontrar una solución a la situación financiera.

Rescate de la SEPI

A mediados del mes pasado, Naviera Armas también solicitó una inyección de unos 100 millones al fondo de rescate del Gobierno, gestionado por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).

Naviera Armas compró Trasmediterránea a Acciona en 2018, tras desembolsar 260 millones de euros. No obstante, la crisis del coronavirus ha pillado al grupo con el pie cambiado y la caída del tráfico ha engordado la deuda.