Iglesias va a “presionar” a Sánchez para que el nuevo banco tenga participación pública

Las relaciones entre los dos socios de Gobierno de coalición siguen en el alambre. A los reproches del secretario de Economía de Unidas Podemos tras conocerse la fusión entre Caixabank y Bankia, ahora se ha unido la oposición del vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias. El líder de la formación morada ha indicado que “va a presionar” a Pedro Sánchez para que el Estado tenga participación en la futura entidad.

"Hay una cosa a la que creo que no se puede renunciar, los ciudadanos españoles no solo compraron Bankia con su dinero y sanearon con su dinero un banco que estaba en una situación desastrosa, sino que dieron mucho dinero para el rescate del sistema financiero", ha defendido.

Banco público

Por otra parte, Pablo Iglesias ha defendido la idea de que España debe tener un banco porque es "necesario" para asegurar algunos servicios financieros que son derechos de los ciudadanos. "Podría actuar de una manera muy sensata, incluso para competir con el sector privado con criterios sociales que son fundamentales", ha dicho.

Iglesias ha apuntado que, a partir de que se va a hacer algo que a su partido no le gusta, les parece que lo mínimo sería mantener la participación pública dentro de la entidad resultante para que, de alguna manera, haya elementos de control público para evitar situaciones como las que acontecieron en el pasado con el sector financiero.

Perdió la batalla

En este sentido, Pablo Iglesias ha aseverado en una entrevista concedida a la Cadena Ser que perdió la batalla porque Bankia fuera española. "En la discusión sobre el programa, yo le insistí mucho a Pedro Sánchez en que mantuviéramos Bankia como un banco público. Perdí esa discusión. Con 35 diputados no pude llegar más lejos y acordamos que íbamos a convertir el Instituto de Crédito Oficial (ICO) en una banca pública. Me hubiera gustado que el destino de Bankia fuera diferente"

En este sentido, Iglesias quiere que la nacionalización del ICO sea cuanto antes aunque cuenta con la oposición de Nadia Calviña, quien ya entiende que la entidad ya lo es.