El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha valorado positivamente la posible fusión entre Caixabank y Bankia. El líder del Ejecutivo ha remarcado que la operación posee “elementos positivos” y que será “conveniente para a la economía de nuestro país”.
A pesar de considerar que “las dos compañías tienen buenos mimbres”, Sánchez ha incidido en que el Estado tiene que ver las condiciones de dicha fusión. No obstante, recalca que, de llegar a buen puerto las conversaciones, la operación será acertada porque puede ayudar al "propio interés general, a la estabilidad del sector financiero y a maximizar la participación pública".
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Cohesión territorial
Pedro Sánchez también ha alabado la operación desde el punto de vista político y territorial ya que la fusión conlleva a una presencia importante en Madrid, Cataluña, Baleares y Comunidad Valenciana.
Respecto al malestar de Unidas Podemos por desconocer la operación, el líder del Ejecutivo ha resaltado la “confidencialidad” de la operación: "Lógicamente quienes la sabían son los responsables de economía del Gobierno; tenemos que garantizar esa confidencialidad y ser muy conscientes de que el proceso no ha terminado".
Un paso adelante
Pedro Sánchez ha puesto en valor el buen recibimiento de los inversores a la posible fusión entre ambos bancos. “Bankia se revalorizó un 33% durante la jornada del viernes y es algo muy positivo para los intereses generales”.
Por último, el presidente del Gobierno ha dicho que el “sector debe dar un paso adelante”, en referencia a otras entidades que también tienen en mente realizar una integración, por la “perspectiva del tamaño de la banca española”.