Dos semanas llenas de rumores, alimentadas por el Banco de España o el Banco Central Europeo, han desembocado en una noticia de un importante calado en el sistema financiero español. Una posible fusión bancaria planeaba sobre el ambiente y Caixabank y Bankia confirmaban las negociaciones para crear un gigante del sector. A pesar de la envergadura de la operación, ambas entidades conocen a la perfección este proceso, que ahora dejaría un gigante bancario valorado en 650.000 millones de euros.
Si bien Caixabank reconoció que no estaba dentro de la hoja de ruta una posible adquisición o fusión, Bankia, participada por el Estado en un 60%, sí ha sido algo más concisa y ha dejado la puerta abierta a estas operaciones en las últimas comparecencias de su presidente, José Ignacio Goirigolzarri, o la propia ministra de Economía, Nadia Calviño.
El banco de las cajas
Ambas compañías saben bien lo que supone integrar varias entidades en una sola. La historia más reciente es la de Bankia. Fue en diciembre de 2010, en plena crisis económica y la peor época del sector financiero desde 1927, cuando se creó el Banco Financiero de Ahorros (BFA), y bajo esta agrupación nacería meses después lo que conocemos como Bankia.
Esta compañía fue creada con el resultante de la fusión, bajo la figura de un Sistema Institucional de Protección, de las antiguas Caja Madrid, Bancaja, Caja Canarias, Caja Ávila, Caixa Laietana, Caja Segovia y Caja Rioja.
Bankia sale a bolsa
Dicha entidad salió a bolsa en julio de 2011 a un precio de 3,75 euros la acción, llegando a captar 3.092 millones de euros. Bankia cubrió los requerimientos de capital mínimo establecidos por el Real Decreto Ley para el Reforzamiento del Sector Financiero. Once meses después, Bankia anunció que debía ser intervenida con dinero del Estado para salvar su situación tras la crisis económica. Así, la entidad percibió ayudas de más de 20.000 millones de euros.
Fue entonces cuando Mariano Rajoy nacionalizó el banco y se produjo una reestructuración dentro de la entidad, con la dimisión de Rodrigo Rato (presidente de la empresa) como medida más importante. Las acciones durante esas jornadas tuvieron alta volatilidad y llegaron a perder casi el 50% de su valor. A cierre de este jueves, los títulos tienen un valor de 1,04 euros.
Cien años de integraciones
A la actual Caixabank tampoco le coge de nuevas esta fusión. Desde que a principios de los años 20 tuviera las primeras fusiones con otras instituciones benéficas hasta la fecha, la entidad tiene en su haber importantes adquisiciones.
La mayor actividad llegó a partir de los años 90, una vez que se permitió a las cajas de ahorro --La Caixa lo era por entonces-- abrir oficinas fuera de sus territorios de origen. La Caja de Pensiones para la Vejez y de Ahorros de Cataluña y Baleares se fusionó en el año 1990 con la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Barcelona.
Más integraciones desde su salida a bolsa
Una vez que la entidad decidió salir a bolsa en 2007, La Caixa se convirtió en una fundación bancaria y la parte de carteras participadas a través de Criteria CaixaCorp, que dio el salto al parquet, se convirtió en lo que hoy conocemos como Caixabank.
Desde entonces, el banco ha realizado diferentes adquisiciones como Caixa Girona, Bankpyme, Banca Cívica, Banco de Valencia (recordemos que su sede reside en Valencia tras el desafío independentista) y el negocio de Barclays en España.