Todas las instituciones y organismos, públicos y privados, deberán colaborar para reactivar la economía, maltrecha por la pandemia del Covid. El Consorcio de la Zona Franca es consciente de ese mensaje y lo propaga a través de su propia actividad. El Consorcio y las empresas implantadas en su ámbito de actuación han aportado un total de 9.112 millones de euros al PIB, a lo largo del pasado año, y han generado más de 137.000 empleos, tal y como este miércoles han dado cuenta el delegado especial del Estado en el Consorci, Pere Navarro, y Blanca Sorigué, directora general de la entidad en la presentación de la memoria anual corporativa.
El organismo quiere reforzar su plan estratégico para poder impulsar, realmente, esa reactivación y lo plasmará con un cónclave en octubre para promocionar la nueva economía. Se trata del BNEW (Barcelona New Economy Week), la primera cita en el mundo económico, tras la pandemia, que se completará con la posible inauguración, antes de acabar el año, de la fase inicial del hub tecnológico DFactory.
Pere Navarro y Blanca Sorigué, en el Consorci de la Zona Franca / CZF
Tecnología e innovación
El Consorci, como ha destacado Pere Navarro, ha generado ese total de 137.000 empleos, y constata que el organismo empresarial puede ejercer de tractor de la economía catalana, con distintos proyectos.
La clave, a juicio de Navarro y Sorigué, es que se ha puesto el foco en tres ejes principales: la generación de negocio, la innovación y sostenibilidad y un plan comprometido con la Agenda 2030. Todo eso pasa por la tecnología, la innovación y el desarrollo sostenible. Pero, ¿con qué recursos? En la memoria se señala que el ejercicio de 2019 se cerró con un volumen de negocio de 55,5 millones de euros y un beneficio de 14,1 millones de euros.
Referentes en Lógistica e Industria digital
La gran apuesta ahora es ese certamen en octubre, que tendrá un formato híbrido, entre presencial y virtual –una posible tónica ahora en todos los foros empresariales y sociales—y que debe marcar un nuevo periodo de reactivación económica. Lo que se pretende es ser una referencia en las tendencias en Logística, Real Estate, Industria Digital, eCommerce y Zonas económicas en todo el mundo durante esa semana del certamen de octubre. “En un contexto tan complejo como el actual, la entidad está centrada en la puesta en marcha de proyectos e iniciativas innovadores para reforzar nuestra posición como polo industrial líder en el área del Mediterráneo, y que nos debe servir, además, para atraer, consolidar y proyectar empresas de alto valor añadido”, según Pere Navarro.
A lo largo del pasado año, el Consorci impulsó dos grandes proyectos para acelerar esa transformación digital industrial en el área metropolitana de Barcelona. Se trata del 3D Factory Incubator, que tuvo una inversión de tres millones de euros, y que es la primera incubadora empresarial de alta tecnología 3D en Europa. Unas 30 empresas, desde start-up a grandes departamentos de I+D de grandes multinacionales, han pasado por la incubadora para desarrollar sus proyectos.
Y la otra iniciativa, junto con Leitat, ha sido el impulso del hub tecnológico DFactory 4.0, con una inversión inicial de 17 millones de euros en la primera fase, y que tendrá una superficie total de 100.000 metros cuadrados. Según Sorigué, “en 2019 convertimos a Barcelona en la capital mundial de la logística, seguimos atrayendo talento internacional y reforzando el papel de la ciudad como hub tecnológico para las start-ups”.