El enfado en el mundo del juego es mayúsculo. Las casas de apuestas se desmarcan del nuevo real decreto que “nada tiene que ver”, tal y como cuentan fuentes del sector, con el primer borrador publicado en febrero. Tampoco ha gustado que se hayan "tenido que enterar por la prensa” de las nuevas intenciones de Alberto Garzón, ministro de Consumo.
Es decir, no han gustado ni el fondo ni las formas. Las fuentes consultadas por Crónica Global ven “inadmisible” que se haya restringido el márketing, la captación y la publicidad del juego online privado y que al Gobierno “se le haya olvidado” regular, en cambio, las Loterías y Apuestas del Estado. El organismo público sí podrá publicitarse sin restricciones ya que el real decreto, que se aprobará en septiembre, no contempla impedimentos para la Primitiva, Lotería Nacional o la Quiniela.
Medidas legales
Desde la asociaciación de empresas Jdigital subrayan que “es altamente preocupante la discriminación a la que se somete al juego privado con respecto al público”. De hecho, consideran que se está atentando contra la libertad de empresa, “derecho fundamental reconocido expresamente en el artículo 38 de la Constitución Española, y en la Carta Europea de Derechos Fundamentales”.
En este marco legislativo, fuentes del sector del juego aseveran que durante los próximos días se van a reunir con diversos equipos de asesoría jurídica para, si se diera el caso y el real decreto se aprueba, “acudir a los tribunales” y velar por “los derechos” de decenas de compañías.
Apelan a la Comisión Europea
Dicho real decreto ya se ha enviado a Bruselas y será la CE la que dé luz verde para que se apruebe el texto en España. Desde Jdigital se recuerda que “fue la misma Comisión Europea quien recomendó, a principios de 2019, impulsar leyes que den el mismo trato al juego estatal que al juego privado”.
La institución espera que “la CE se pronuncie al respecto del socavamiento de la competencia que supone el proyecto de Real Decreto” que se hizo público este mismo jueves.
Desaparición del diálogo
Por otra parte, voces del sector no entienden por qué el Ministerio de Consumo ha roto el diálogo establecido durante meses, que sirvió para “sentar bases constructivamente”. “No teníamos idea alguna de las nuevas intenciones de Garzón”, señalan fuentes del juego.
Además, recalcan que “el pasado mes de enero entró en vigor la modificación, a propuesta de la propia industria, del Código de Conducta sobre Comunicaciones Comerciales de las Actividades de Juego, en el cual el sector se autoimpuso restricciones adicionales a sus comunicaciones promocionales para proteger a los colectivos más vulnerables”.
Preocupación en otros sectores
Obviamente, la noticia de la prohibición de que las casas de apuestas no puedan lucir su logo en las camisetas de clubes deportivos también ha caído como un jarro de agua fría. Fuentes consultadas de La Liga esperan que el nuevo real decreto se modifique, ya que “supondría un impacto negativo en las cuentas de los equipos de fútbol”. Las casas de apuestas mueven alrededor de 200 millones de euros en patrocinio, según datos de la Dirección General de Ordenación del Juego ( DGOJ).
El mundo del fútbol es el más representativo. 18 de los 20 clubes de la máxima competición española tienen acuerdos con alguna casa de apuestas con una cuantía que va desde el millón de euros hasta los diez millones, dependiendo del caché de las escuadras.
Medios de comunicación
Los medios de comunicación serían el otro sector más perjudicado. Los programas deportivos de radios y los periódicos podrían sufrir un descenso en sus ingresos sin precedentes. Según el informe de DGOJ, el juego online destinó 81,3 millones de euros a márketing en un solo trimestre.
Por otra parte, desde Telefónica (dueña de los derechos televisivos de La Liga) se llama a la cautela y se asevera que los ingresos por publicidad de casas de apuestas es “reducido” y que su fuente de ingresos provienen de los abonados.