El Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) ha presentado los resultados pertenecientes a 2019. El organismo registró un beneficio de 14,1 millones de euros y unos ingresos netos de 55,5 millones (el 6,5% más que en 2018).
Según consta en sus cuentas anuales, el consorcio consiguió reducir el año pasado su deuda al cerrar el ejercicio anterior en los 24,1 millones de euros (por los 33 millones del 2018) y registró unos gastos de explotación de 49,5 millones de euros.
Esfuerzo del consorcio
El delegado especial del Estado en el CZFB, Pere Navarro, ha valorado “el esfuerzo” del consorcio por adaptarse a la situación excepcional que vive el mundo empresarial debido al coronavirus.
"Nuestro objetivo es contribuir a ayudar a las empresas de nuestro entorno, así como a la ciudad de Barcelona, a salir fortalecidas de esta época de incertidumbre", ha recalcado.
Nuevos horizones
El propio directivo ha desvelado las líneas en las que trabaja el consorcio para reactivar la economía. El primero de ellos es el el impulso del BNEW, la primera gran cita para ello, concebida como un evento totalmente disruptivo que se celebrará entre el 6 y el 9 de octubre.
Además, la sociedad trabaja para la inauguración de la DFactory, un centro tecnológico para el fomento y el desarrollo de la industria 4.0, prevista para finales de año.
Próxima memoria
Además, el consorcio ha aprobado la memoria del CZFB de 2019, que será presentada a la sociedad próximamente.
En dicho documento se añade el valor añadido que ha aportado a la economía del al área metropolitana de Barcelona y la inversión en sus proyectos de futuro.