Una de las grandes vías de ingresos de la banca española ha sufrido un parón sin precedentes. El mercado hipotecario se ha frenado en seco durante los últimos meses debido a la crisis del coronavirus. Y con este panorama las entidades financieras se preparan para jugar una nueva partida de ajedrez con la subrogación como reina del tablero.

Los últimos datos registrados son de marzo, justo cuando la pandemia llegó a España y se paralizó el sistema económico. Concretamente, el tercer mes del año se saldó con 26.382 préstamos formalizados para la compra de vivienda, un 14,6% menos interanual. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), se trata del menor volumen de hipotecas desde septiembre. Y todo hace indicar que los meses de abril y mayo serán mucho peores.

 

La firma de hipotecas sobre viviendas se desploma un 14,6% en marzo / EP

El euríbor, otro aliciente

Fuentes del sector indican que este parón provocará que el precio de las hipotecas toque suelo y todo hace pensar que “el sector en conjunto subirá el precio de los créditos”. Además, aseguran que los criterios para concederlas se elevarán para que la banca no incurra en los mismos errores que en 2008. 

A su vez, el contexto de las hipotecas ha cambiado radicalmente debido al euríbor. El índice de referencia para la concesión de créditos para la compra de casas no para de subir, coincidiendo con la crisis del coronavirus, provocando un encarecimiento de las hipotecas. Según los cálculos de la banca, los préstamos al hogar se encarecerán alrededor de 88 euros el año que viene.

La crisis dispara las peticiones

Con todos estos factores, y con la gente en plena incertidumbre porque sus salarios seguramente no serán en muchos casos como los que disfrutaban antes del coronavirus, ya se dan movimientos para buscar el ahorro mensual. “Hemos recibido cientos de peticiones en apenas unas semanas para obtener información sobre las subrogaciones”, señalan fuentes del sector a Crónica Global, e indican que una buena negociación podría provocar hasta “30.000 euros de ahorro”.

Desde el sector bancario subrayan que estas prácticas son “normales”, puesto que en contexto de crisis “la inversión se contrae y la vivienda es la principal damnificada”, por lo que firmar “nuevas hipotecas” va a ser un acto complicado. Por lo que la subrogación puede ser un flotador salvavidas para las entidades españolas.

Buen momento

En este sentido, desde MyInvestor señalan que “es un buen momento para subrogar hipotecas porque los tipos de interés actuales permiten ofrecer condiciones muy competitivas a tipo fijo y variable. Creemos que los precios de las hipotecas han tocado suelo --de no ser así, hay muy poco recorrido a la baja-- y no es muy probable que veamos unos precios tan bajos como los actuales en el futuro”.

No obstante, Juan Villén, responsable de Idealista Hipotecas explica que “cada situación personal es diferente, habrá casos en los que tenga sentido la subrogación y otros en los que no, pero sin duda merece la pena aprovechar el mayor tiempo libre que tenemos por el confinamiento para realizar al menos el ejercicio de cálculo por el ahorro potencial que se puede conseguir” .

Cuanto antes mejor y a tipo fijo

Respecto a qué tipo de hipoteca es mejor, MyInvestor explica que la subida del euríbor hace más atractivas las hipotecas a tipo fijo para los clientes. “Creemos que este producto es favorable tanto para el cliente como para las entidades”, matizan.

Por otra parte, desde HelpMyCash.com recuerdan que “los bancos siguen operando con normalidad”, por lo que el estado de alarma “podría ser una gran oportunidad” para acometer una mejora de las hipotecas, siendo la subrogación una de las mejores opciones.