Las señales del mercado mayorista de la electricidad apuntan al tramo final del tercer trimestre como el inicio de lo que podría ser la recuperación de la economía tras el impacto que sufrirá por la crisis del coronavirus. El desplome de la actividad, derivada de la declaración del estado de alarma y las medidas restrictivas para prevenir la propagación del Covid-19, ha derivado en una caída de los precios cuya remontada se dibuja claramente en el tramo final de 2020.
El efecto del parón económico se ha dejado sentir con un notable descenso de los precios de la electricidad en el mes de abril, que han experimentado una caída del 36% en relación con los registrados en marzo y de un 65% si se compara con el mismo mes de 2019. Cabe tener en cuenta que las dos semanas de permiso retribuido recuperable para los trabajadores de actividades no esenciales, decretado por el Gobierno para reforzar las medidas contra el Covid-19 y evitar el colapso de los centros sanitarios, se desarrolló casi en su totalidad durante el mes de abril.
Precios a la baja hasta el verano
De acuerdo con el comportamiento de los contratos de futuros sobre los precios de la electricidad en el mercado mayorista, la tendencia a la baja se mantendrá durante los próximos meses, pese a que los planes diseñados por el Ejecutivo para la desescalada prevén una vuelta progresiva a la actividad, con el regreso escalonado de la actividad en los comercios y en los locales de hostelería (ya activados en la fase 0 del plan).
Esta dinámica se refleja de forma muy gráfica en los futuros referidos al mes de mayo. En las últimas dos semanas, su cotización ha caído más de un 17%. A mediados de abril, el mercado apostaba por un precio medio de la luz en el mercado mayorista de 26 euros por megawatio/hora (MW/h), mientras que los últimos cruces reflejan un precio levemente por encima de la cota de 21 euros MW/h.
Octubre, punto de inflexión
La tendencia se mantiene en el caso de los contratos de los próximos meses. Tanto los de junio como los de julio experimentan descensos superiores al 12%, que incluso se incrementan hasta el 13,5% en el caso de los futuros de agosto.
Sin embargo, el mercado marca un punto de inflexión a partir del tramo final del mes de septiembre. Los futuros referenciados a este mes aún han registrado caídas en los últimos días de abril, aunque a un menor ritmo (en torno al 8%). El giro se materializa a partir de octubre, cuando la evolución del precio comienza a ser positiva. Así, los contratos referidos a octubre cotizaban hace un par de semanas en el entorno de 37,5 euros MW/h mientras que han cerrado abril claramente por encima de 40 euros, una subida superior al 7%.
Caída de la demanda
Algo parecido sucede con los contratos del tercer trimestre, cuyo precio ha experimentado un avance del 6%, y del cuarto trimestre, que recupera casi un 5%. Todos estos repuntes se han registrado en el mismo periodo en el que los futuros de los meses del segundo y tercer trimestres registran notables descensos.
El desplome sufrido por los precios en estas semanas está muy relacionado con la caída de la demanda a partir de la entrada en vigor del estado de alarma. Esta tendencia fue especialmente acusada durante las dos semanas de interrupción de la actividad considerada no esencial. Una vez transcurrido este periodo, el consumo eléctrico no ha vuelto a recuperar ni siquiera las cifras que presentaba durante los días inmediatamente posteriores a la declaración del estado de alarma.
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Economía, Nadia Calviño, señaló este viernes que el mayor impacto de la crisis en la economía española se producirá en este segundo trimestre y que podría empezar a verse un moderado repunte a partir del tercero. Las señales del mercado eléctrico sitúan este momento en el tramo final de este periodo. Y además, a un ritmo notablemente sostenido.