Casi 13 millones de euros: 12,62 millones. Este es el valor del contrato de Vitalia Home para gestionar la residencia de Sants (Barcelona) en la que han fallecido cerca de 29 personas --según las fuentes cercanas-- o bien 21, según la empresa que dirige Chema Cosculluela, el rey de los asilos. El grupo firmó un contrato de concierto de plazas con la Generalitat de Cataluña en 2015 en el que se comprometía a "prestar asistencia sanitaria". Pese a ello, ha tenido que ser desinfectada en varias ocasiones por los Bomberos, la Unidad Militar de Emergencias (UME) del Ejército y rescatada por los hospitales de la Ciudad Condal.
Antonio Morales, director de Operaciones de Vitalia, actualizó ayer el estado de los centros de la compañía en la autonomía catalana. "Presentan una carga vírica mucho menor", explicó. "Hay un porcentaje creciente de residentes recuperados", agregó. Vitalia, añadió el directivo en conversación con este medio, ha adquirido 4.000 test PCR "que han permitido avanzarse al virus y no trabajar a ciegas". Ello ha permitido sectorializar los geriátricos, ¿Qué harán ahora? "Retomar las visitas cuando lo permita la autoridad sanitaria y proteger a los centros durante el post-Covid, ya sea con más medidas protectoras o arcos desinfectantes", ilustró el directivo a Crónica Global.
Prometía "asistencia sanitaria"
Lo factual es que el refuerzo higiénico-sanitario de los centros de Vitalia en Cataluña se producirá ahora, en 2020, y tras una pandemia. El Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias licitó el contrato para 90 camas de residencia en el distrito de Sants-Montjuïc en 2015. Solo se presentó una empresa, Vitalia, que logró la adjudicación. El grupo de Cosculluela no habría tenido rival ni siquiera si hubieran concurrido otros competidores, pues logró un 100% de puntos en la propuesta económica: 51 puntos de 51 posibles. Cazó el contrato en 2016 prorrogable a cinco años. La última extensión la logró la firma con el conseller Chakir el Homrani (ERC) en Trabajo en 2019. La concertación era ya de 110 plazas de 190 y por un monto anual de 2,4 millones al año: la residencia ya dependía más del dinero público que de la comercialización privada de plazas.
Tampoco menor es el hecho de que en el contrato firmado por la Generalitat con la compañía de residencias, una de las big five o cinco grandes del sector en España, ésta se comprometiera a prestar "asistencia sanitaria" a los mayores en caso de necesidad. Es cierto que Vitalia Home ha realizado un esfuerzo para atajar el envite del patógeno en sus centros. Pero también es factual que cobra dinero público para que en éstos hayan médicos y enfermeros, tal y com refleja la primera adjudicación de 2015 [consultar expediente aquí].
29 muertos y decenas de contagios
Sea cual fuere el contrato por el cual Vitalia gestiona su residencia en Sants, ésta ha tenido graves problemas desde marzo, tal y como avanzó este medio. La compañía abordó con cuarentenas preventivas el golpe del microorganismo en sus geriátricos en Cataluña, pero tuvo escaso éxito. Solo en Sants se cuentan entre 21 y 29 fallecidos, según la fuente. En Tordera (Girona), donde el grupo de Cosculluela opera otro activo, el Ayuntamiento negó el 31 de marzo que hubiera ningún caso. Nueve días después, el mismo equipo de gobierno tuvo que activar un protocoo de emergencia por la detección de 12 positivos en el asilo.
Los problemas de Vitalia Home en Cataluña, un grupo que dirige el exconsultor Chema Cosculluela y que factura cerca de 100 millones al año, no son únicos. Su rival DomusVi, el líder en el sector de las residencias en España, vio ayer como la Fiscalía Superior de Cataluña le incluía en una investigación global por posibles delitos tras el fallecimiento de al menos 48 personas mayores en su complejo de Premià de Mar (Barcelona), llamado Ca n'Amell. Las pesquisas se producirán tras una doble intervención del centro por parte de la Consejería catalana de Salud, un rescate que sigue a la denuncia del Ayuntamiento, que alertó de ocultación de muertes por Covid-19, la infección que causa el virus.