Alerta de Botín: “La recuperación no será tan intensa como la caída”

Banco Santander revisará en los próximos meses sus objetivos para 2020 anunciados a comienzos de años debido al impacto de la crisis del coronavirus. Su presidenta, Ana Botín, aseguró en la junta de accionistas de la entidad que la expansión del Covid-19 provocará una fuerte contracción del PIB mundial en el primer semestre que vendrá seguida de una notable recuperación “aunque no tan intensa como la caída”.

Por este motivo, la ejecutiva anunció que Santander pondrá bajo revisión las previsiones anunciadas en la presentación de resultados, a finales de enero, que se basaban en un incremento de los beneficios a un ritmo de “dígito simple alto”, es decir, entre el 5% y el 9%.

Ana Botín, durante la junta general ordinaria de accionistas de Santander / EP

Llamamiento al Gobierno

Eso sí, Botín adelantó que los resultados del primer trimestre de 2020, que acaba de finalizar, estarán “muy en línea” con los del mismo periodo de 2019 debido a que los efectos de la crisis aún no se han dejado sentir. Incluso, la presidenta de Santander aseguró que los créditos han experimentado un elevado crecimiento en marzo en relación con las cifras de febrero, “lo que prueba que, desde el primer momento, estamos apoyando a nuestros clientes” en el complicado escenario que ha planteado la expansión del virus.

En este sentido, Ana Botín, hizo un llamamiento al Gobierno para que apoye a las empresas en el marco de la crisis, con el fin de que puedan mantener los puestos de trabajo y también para que colabore con el sector privado para “planificar cuanto antes la vuelta al trabajo”, en relación con la paralización de buena parte de la actividad económica como consecuencia de la declaración del estado de alarma.

Mantener los empleos

En el discurso dirigido a los accionistas en una atípica junta, celebrada en Madrid y sin asistencia presencial, Botín reiteró que las empresas deben ser “parte de la solución” para una crisis de carácter sanitario pero que “ha derivado en una crisis social y económica sin precedentes”. La ejecutiva incidió en el hecho de que, a diferencia de 2008, el sector financiero presenta en la actualidad una notable solvencia que le permitirá apoyar a las empresas para evitar que destruyan empleo.

No obstante, Botín insistió en que “la mayoría de las empresas necesita el apoyo del Gobierno para mantener los puestos de trabajo”, especialmente en aquellos sectores “que se han desplomado”.

“Con la colaboración de los sectores público y privado debemos planificar cuanto antes la vuelta al trabajo, de los más jóvenes, de los que ya están curados”, sin olvidar el refuerzo de “la protección a los que tienen más riesgo”, en alusión a las personas mayores.

Suspensión de dividendos

Botín recordó que, en una decisión de última hora, Santander decidió cancelar el dividendo en cuenta del ejercicio 2019, al hilo de las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE). Santander celebrará una junta antes de que concluya el mes de octubre para tomar una decisión sobre la aplicación de los resultados del año anterior.

La presidenta recordó que los 1.600 millones de euros que el banco no pagará a sus accionistas permitirán fortalecer el capital de la entidad, “lo que nos permitirá aportar hasta 30.000 millones de euros más de liquidez” para el apoyo a autónomos y empresas. Botín anunció que la cifra viene a sumarse a otros 60.000 millones de euros que aportará adicionalmente la entidad. “En total serán 90.000 millones de euros de liquidez para apoyar a las empresas y los trabajadores puedan incorporarse a sus puestos”.

Sin ERTE

Precisamente en materia de empleo, Ana Botín valoró el hecho de que Santander no ha llevado a cabo ningún expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). “Consideramos que es necesario que, aquéllos que podamos, lo evitemos porque para salir cuanto antes de la crisis es fundamental hacer todo lo posible por mantener el empleo”.