Mercadona sigue en fase de ascenso tras elevar sus beneficios un 5% en 2019, hasta los 623 millones de euros. La cadena de supermercados mantiene el pulso en medio del plan de inversiones para renovar sus tiendas y potenciar la transformación digital, para lo que destinó la cifra récord de 2.200 millones el año pasado. La empresa planea un gasto de 10.000 millones entre 2017 y 2023 para apuntalar su futuro.
El presidente de Mercadona, Juan Roig, ha destacado la "brutal transformación" de la empresa desde 2017 hacia el modelo de tienda eficiente y el desembarco en Portugal, donde se abrieron 10 tiendas el año pasado y se esperan otras 10 para 2020. El objetivo es alcanzar los 150 centros en el país luso, donde el directivo ha reconocido que todavía es un mercado que debe consolidarse antes de dar el salto a otros países.
Incremento de las ventas
A pesar de que el beneficio neto ha experimentado una considerable moderación frente al incremento del 84% de 2018, Mercadona ha superado sus propias expectativas, después de anunciar el año pasado una caída de la ganancia para afrontar las inversiones pendientes. “Hicimos lo que teníamos que hacer, reducir los beneficios para posicionarnos y renovar las tiendas”, ha apuntado Roig.
En cuanto a la facturación, Mercadona cerró el año con un incremento de las ventas del 5%, hasta los 25.500 millones, de las que el 1% procedieron del comercio online. De hecho, Roig ha puesto el acento en la necesidad de dejar crecer tanto el mercado electrónico como el portugués, ambos en fase inicial y que facturaron 40 y 32 millones de euros, respectivamente. La marca tiene una cuota del 26,9% del mercado español y genera el 1,95% del PIB.
Transformación de las tiendas
Mercadona inició en 2017 el plan de transformación hacia el modelo de tienda 8 —eficiente—, que en 2019 contaba 800 comercios transformados. La previsión es que para 2023 se alcance un total de 1.600 comercios que trabajan con el nuevo sistema, a razón de 200 por año. Otra de las grandes apuestas es Listo para Comer, basado en la venta de comida preparada, y que este año seguirá ahondando en la transformación tras invertir 170 millones. “La cocina del siglo XX como la conocimos no estará a mitad del siglo XXI”, ha afirmado Roig, que ha reconocido la necesidad de encontrar proveedores para el nuevo servicio.
Más allá de Listo para Comer, Roig ha detallado que cuentan con 1.400 proveedores especializados, número que buscan aumentar: “Se están buscando proveedores en España y Portugal y si no se encuentran buscaremos en el resto del mundo”. De hecho, ha reconocido que la apuesta por mejorar la calidad ha provocado que se hayan retirado productos que “no cumplen los requisitos exigidos por los clientes”.
Expansión de la 'colmena'
Sobre la implantación de la colmena, gestionada de manera diferenciada por la hija del presidente, Juana Roig, será en el segundo trimestre cuando comience a operar en Madrid, tras su puesta en marcha en Valencia y Barcelona. El modelo supone el 2% de las ventas en ambas ciudades.
El presidente de Mercadona se ha mostrado optimista sobre la marcha del negocio de cara a 2020 y prevé un hito tanto en facturación --crecer un 4% más--, como en beneficios, hasta los 700 millones de euros.
La cadena también ha puesto el acento en la transformación de sus envases y la reducción del plástico en los casos en los que la seguridad alimentaria lo permita. Así, de cara a 2025 ha asegurado que se reducirá este material un 25%, mientras que los envases que se usen serán reutilizables y reciclados.