El sistema de 'motosharing' de Colau, en peligro por las presiones de los grandes operadores

El modelo de motosharing o negocio de motos de alquiler ideado por el Ayuntamiento de Barcelona, en peligro por las presiones de los grandes operadores del sector. Unas presiones que llegan cuando el consistorio que lidera Ada Colau (BComú) está estudiando la documentación presentada por las empresas que siguen en el concurso antes de la adjudicación final de las licencias.

Según los expertos, el "el modelo abierto, igualitario y participativo" que ha impulsado Colau para regular el motosharing se ve "empañado" por el plazo fijado a la hora de desplegar las licencias.

Los emprendedores, sin respuesta

A pesar de que las bases del concurso contemplaron una extensión de 30 días más en el caso de que los emprendedores demostrasen que sus vehículos están en producción, la realidad es que las condiciones que fija el ayuntamiento en este sentido dejan en el aire algunas cuestiones interpretativas del ámbito jurídico, de modo que los emprendedores pequeños no obtienen ninguna respuesta tras presentar los correspondientes escritos.

"Este silencio, junto con las constantes muestras de desacuerdo de los grandes operadores que no tienen ninguna dificultad para desplegar sus motos después de estar operando hasta ahora en una situación no regulada, aumentan los temores de los pequeños adjudicatarios de que el modelo que quería implantar este gobierno municipal se vea afectado", sostienen las mismas fuentes.

En manos de los gigantes

Si esto se confirma, el sector quedaría de nuevo en manos de los gigantes de la movilidad sin oportunidad de entrada a nuevos operadores y sin poder actuar bajo un libre mercado real. Para las empresas de nueva creación "sólo de esta forma, se puede ofrecer un servicio competitivo y de calidad para el ciudadano".