Este martes, 3 de diciembre, se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad y con este motivo la Fundación Randstad ha llevado a cabo un estudio que analiza la evolución de la contratación profesional a personas de este colectivo. Con datos del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) de enero a octubre entre 2010 y 2018 y atendiendo a la tipología del contrato de estos profesionales -indefinido y temporal-, y su comunidad autónoma y provincia, Randstad destaca que el número de contratos rubricados por profesionales con discapacidad ha superado por primera vez en la historia las 100.000 firmas.
Durante el periodo de enero a octubre se han realizado 100.003 contrataciones en este colectivo, un 1,7% más con respecto a la cifra alcanzada el año anterior, cuando se registraron 98.375. Este porcentaje de crecimiento es el más discreto registrado desde 2012.
El 81,2% son contratos temporales
El estudio revela que entre 2010 y 2012 el volumen de contratos a personas con discapacidad se mantuvo alrededor de los 52.000. Desde entonces, el volumen registró siete años consecutivos de aumento, hasta superar este año los 100.000. Desde 2010, el número de contratos firmados por profesionales con discapacidad ha crecido un 95,4%.
En cuanto a la tipología de los contratos realizados, el estudio destaca que durante los diez primeros meses de este año, 18.773 profesionales con discapacidad firmaron un contrato indefinido en nuestro país, lo que supone el 18,8% del total de firmas, mientras que el 81,2% restante, es decir, 81.230 contratos, fueron temporales. Comparado con el año anterior, los contratos indefinidos se redujeron en un 5,6% mientras que los contratos temporales aumentaron un 3,5%. Cabe destacar la importancia de la conversión de los contratos a indefinidos, ya que el 43,2% de los contratos indefinidos procede de uno temporal. Esto supone que durante 2019 se llevaron a cabo 8.115 conversiones de contratos temporales a indefinidos.
Crece la contratación solo en ocho comunidades
La región y provincia de residencia del trabajador es fundamental a la hora de analizar la contratación de los profesionales con discapacidad, que solo crece en ocho de las 17 comunidades autónomas. Así, la Fundación Randstad destaca que Asturias (14,6%), Castilla-La Mancha (12,5%) y Baleares (10,5%), son las comunidades donde más crece la incorporación de profesionales con discapacidad en el último año, todos ellos con incrementos de dos dígitos. A continuación y también por delante de la media nacional (1,7%), se sitúa Andalucía (5,3%), la Comunidad de Madrid (5,2%) y Cataluña (2,2%), mientras que Extremadura (0,9%) fue la única región que creció por debajo de la media.
Por su parte, Galicia (-0,9%), Comunitat Valenciana y la Región de Murcia (ambas con -1,8%), y Aragón (-2,7%), fueron las comunidades que registraron los descensos más discretos. Detrás se sitúan Cantabria (-3,9%), Euskadi y Castilla y León (-5,7%), Navarra (-7,6%) y Canarias (-7,7%). La Rioja ha obtenido el mayor descenso de la contratación de profesionales con discapacidad a nivel nacional, registrando una caída del -20,8% con respecto a 2018.
Cataluña, tercera en términos absolutos
Por provincias, Ávila (31,2%), Zamora (19,4%), Guadalajara (18,7%) y Huelva (17,3%), han sido las que experimentaron un mayor crecimiento del contratación en este segmento de profesionales, mientras que Soria (-27,4%), Guipúzcoa, (-16,4%), Cáceres (-13,4%) y Burgos (-11,1%) han registrado las caídas más relevantes.
En términos absolutos, Andalucía (18.845), la Comunidad de Madrid (16.493) y Cataluña (12.886) son las regiones donde los profesionales con discapacidad firman más contratos, suponiendo en conjunto el 48,2% del total del país. Por su parte, La Rioja (813), Navarra (903) y Cantabria (1.491) obtuvieron los volúmenes más discretos a nivel nacional.