Una parte del empresariado catalán ha advertido de los riesgos que tendría para la economía la “cronificación de las protestas diarias” en las calles de Barcelona. Entre las voces críticas con la crisis política y social tras la sentencia del 1-O se encuentran el Gremio de Hoteles de Barcelona, el Gremio de Restauración de Barcelona, la asociación de apartamentos turísticos Apartur, Barcelona Oberta y la asociación de retail Comertia.
Las entidades han mostrado su “preocupación” por la situación en las calles a través de una nota emitida este lunes, mismo día en que el independentismo dirige sus protestas contra la presencia del rey en Barcelona.
Daño a la imagen
El empresariado ligado al sector turístico considera que la situación “daña gravemente la imagen, la reputación y la confianza de la ciudad de Barcelona”. Asimismo, estima que, de no reconducirse la situación, “comportará una importante afectación económica sobre las empresas de la capital catalana”, que terminará por repercutir en el ambito laboral.
La nota del empresariado también pone sobre la mesa las afectaciones que las protestas están suponiendo “sobre la propia sociedad”, al considerar que frenarán “la llegada de inversiones y talento a la ciudad y, por tanto, a la creación de oportunidades de desarrollo y dinamismo”.
Retomar el diálogo
Así las cosas, estas entidades han reclamado a las administraciones “una actitud y una voluntad decidida y firme para tratar de tranquilizar esta situación en las calles”, reconducir la situación al marco del debate político.
La declaración del empresariado turístico llega después de que patronal y sindicatos hayan abierto un espacio de diálogo y consenso para “restablecer la convivencia” en Cataluña. Entre los promotores se encuentran Foment, Pimec, CCOO y UGT.