Alquilar una habitación en un piso compartido en Barcelona es un 2,9% más caro que hace un año. Hacerse con un cuarto supone un gasto medio de 442 euros mensuales. Es decir, se trata de la ciudad española con los precios más caros y, además, una de las que presenta inquilinos de mayor edad a la hora de convivir, con una media de 31 años.
El precio de las rentas de una vivienda completa se ha encarecido un 3% en Barcelona en el último año, un dato que muestra que el alquiler no termina de tocar techo en la capital catalana. Así lo acredita el Informe de Piso Compartido 2019 realizado por el portal Idealista. No obstante, es aún mayor el incremento experimentado en Madrid, que se coloca en el 3,6%.
Incremento de pisos compartidos
Como consecuencia del aumento generalizado de los precios del alquiler de una vivienda completa, el mercado de las habitaciones ha experimentado un fuerte incremento. En concreto la oferta supone ya el 26,9% del total de anuncios que se colocan en el portal.
El coste medio de una habitación en un piso compartido en España ha crecido un 2,9% con respecto a 2018, hasta los 340 euros de media. No obstante, Barcelona (442 euros), Palma (417 euros) y Madrid (415 euros) se sitúan por encima de la media.
Inquilinos más mayores
En cuanto al perfil de los arrendatarios se aprecia cómo los altos precios de alquiler retrasan cada vez más el tiempo de permanencia en un piso compartido. Si tradicionalmente quienes convivían de esta forma eran estudiantes y jóvenes recién incorporados al mercado laboral, ahora la edad media se sitúa en los 30 años. De hecho, en ciudades como Palma y Vitoria la cifra llega a los 34 años, mientras que en Barcelona es de 31 y en Madrid de 29 años.
Así, suelen ser inquilinos que optan por vivir en el centro de grandes ciudades, que ni fuman ni permiten que se fume y no tienen mascotas, según señala el informe. En cuanto a la convivencia, el 71% de los pisos son mixtos, mientras que en el 24,9% son mujeres las arrendatarias, frente al 4,1% de los hombres.