La Cámara de Comercio prevé ahora que el PIB catalán crezca igual que el español

La Cámara de Comercio de Barcelona, presidida por Joan Canadell, ha corregido al alza sus previsiones económicas para el ejercicio en curso y el año próximo. La revisión conlleva un nuevo cambio de tendencia respecto a las estimaciones presentadas en abril, ya que el avance del PIB catalán está ahora al mismo nivel que el crecimiento proyectado para el resto del país.

Los responsables del estudio señalan que la buena marcha de la actividad en el primer semestre del año justifica añadir otras dos décimas a la coyuntura que se espera para finales de año. Se pasa del 2,1% al 2,3%, cifra que aún se sitúa por debajo del 2,6% que se obtuvo a finales de 2018 porque “la economía entra en una fase de maduración”. Es la misma que tanto la Comisión Europea como el FMI señalan que se conseguirá en el conjunto de España para finales de año.

Revisión de 2020

En cuanto al 2020, ahora se indica que el PIB crecerá hasta el 2,1% en lugar del 1,9% estimado en abril. Se justifica por la revisión al alza anterior y “porque se prevé una recuperación de las exportaciones”. Estos datos son mucho más optimistas que los incluidos en el cuadro macroeconómico de la Generalitat, que mantiene el avance del PIB en el 2,2% en el año en curso y en el 1,9% para el próximo.

Se apunta a que Cataluña puede ser una de las regiones más beneficiadas por la firma del Tratado de Libre Comercio entre la UE y Mercosur, ya que las empresas del territorio tienen una exposición limitada en estos mercados --representan el 1,4% de las ventas en el exterior-- que representan casi el 3% del PIB mundial. “Por lo que existe recorrido al alza”, indica el informe de la organización de dinamización empresarial.

Más demanda interna

Con todo, el grueso de la mejora prevista se sustenta en la demanda interna. Se han revisado una décima del crecimiento del consumo privado y público y se han sumado otras tres décimas a la formación pública de capital.

El documento concluye que la “inversión continúa siendo el componente del PIB más dinámico y anticipa así una evolución positiva de la ocupación” en el futuro. También contempla que los salarios crezcan debido a la “previsión de la inflación que para 2019 se sitúa al entorno del 1%”, con el consiguiente impulso para el comercio que supondrá que los catalanes dispongan de un mayor poder adquisitivo.

Se indica que la economía local “ha entrado en una nueva fase de estabilización” que se fijará en tasas por encima del 2% y que el impulso de la actividad en el primer y el segundo trimestre representará una “tendencia que se podría mantener hasta el tercer trimestre”.