Caixabank prosigue con su plan para abrir su primera flagship store, situada en Barcelona. La nueva oficina comercial estará situada en el número 10 de la plaza Francesc Macià y ya se ha avanzado en la definición del concepto, que incluirá albergar un espacio gastronómico que se busca vincular a uno de los chefs estrellados del país.
Fuentes conocedoras del proceso explican que la entidad presidida por Jordi Gual y dirigida por Gonzalo Gortázar se ha acercado a los hermanos Torres. Javier y Sergio Torres recibieron dos estrellas Michelin en el Dos Cielos, el restaurante que cerraron para abrir Cocina Hermano Torres en el barrio de Les Corts de Barcelona el pasado junio. También cuentan con un establecimiento en Madrid llamado Dos Cielos By Hermanos Torres, un local que “va como un tiro” tal y como ellos mismos explicaban en una entrevista en la agencia EFE este verano.
Caras conocidas
El objetivo de la entidad es buscar una colaboración de una firma reconocida para un espacio gastronómico con el que quieren recibir a los clientes. Su objetivo es que la flagship store se convierta en un punto de encuentro habitual de los barceloneses, que no sea sólo una oficina bancaria vistosa. Para ello, les quieren convencer por el estómago y el perfil de los hermanos Torres encajarían al tipo de propuesta que quieren potenciar.
Jordi Gual y Gonzalo Gortázar, presidente y consejero delegado, respectivamente, de CaixaBank / CG
Jordi Gual y Gonzalo Gortázar, presidente y consejero delegado, respectivamente, de CaixaBank / CG
Su paso por los platós de TVE y su carisma ante las cámaras les han convertido en caras conocidas para la ciudadanía. Con todo, fuentes cercanas a los chefs indican que no hay nada cerrado en firme. La entidad también explica que aún no hay fecha de inauguración de la nueva oficina estrella del grupo y que aún se trabaja en definir los detalles que harán este espacio un lugar especial.
Reapertura de La Oca
Otra de las cuestiones que toma fuerza es que se reabrirá el restaurante La Oca, el local que se abrió a finales de los años 60 en el mismo local que ha alquilado Caixabank. Fue uno de los establecimientos más populares de la capital catalana y cerró sus puertas en 2007. La empresa que lo explotaba alcanzó ese año un pacto con los propietarios del edificio, Reig Capital Group, que querían transformarlo en un hotel de cinco estrellas. El proyecto nunca llegó a buen puerto.
La nueva Oca estaría integrada en la store de Caixabank y se plantea como un golpe de marketing de la entidad. Más, si se puede vincular a una de las firmas de restauración top del país. El grupo financiero tirará la casa por la ventana en este local y los rumores sobre la iniciativa indican que destinará un millón de euros sólo en dotar de pantallas gigantes la planta baja del establecimiento. Se espera su apertura para el próximo verano.