El barrio del 22@ se ha convertido en el ejemplo del buen momento del inmobiliario en la ciudad, especialmente en el segmento de oficinas. El tirón de la zona no se limita sólo a los grandes grupos de inversión que financian macroproyectos, también ha beneficiado a pequeños promotores que han sacado del cajón proyectos que habían abandonado al principio de la crisis.
Entre esta oleada de iniciativas que por fin han dado con la financiación necesaria, tal y como explican desde el sector, destaca la construcción de un nuevo edificio de oficinas en la calle Mas de Roda. Impulsará el inmueble de cinco plantas la sociedad Euronivel 10, una filial del grupo familiar Promotora y Consultoría Inmobiliaria (IMSA).
Quiebra y traspaso a Sareb
La empresa que ahora dirigen Maria Luisa y Manuel Bermúdez Gallego inició su actividad en los años 60 en la capital catalana. Su especialidad es el residencial, aunque también se sale de su ámbito de referencia en operaciones puntuales como la que se iniciará en breve en esta parte del 22@.
Para ello, recuperará los planos que el estudio de arquitectura Garcés de Seta Bonet firmó en 2003. Este edificio de oficinas de cinco plantas y unos 4.700 metros cuadrados se incluía en un proyecto más amplio que implicaba la conversión de una antigua factoría de la zona en lofts de lujo en una primera fase y la ejecución después de las oficinas.
Nunca se llegó a ejecutar porque la sociedad que se había constituido para la promoción quebró tras finalizar la obra residencial en 2009, cuyo coste superó los cinco millones de euros. Al final, toda la iniciativa quedó en manos de la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).
Comercialización sobre plano
IMSA ha llegado 10 años más tarde. El interés que despierta el 22@ ha propiciado que la comercialización de los espacios se haya iniciado sobre plano. Lo han hecho a través de BNP y, según fuentes del mercado, ya ha despertado el interés entre potenciales clientes.
Los mismos interlocutores puntualizan que el espacio se podría convertir en la sede de una sola compañía pero que también está adaptado para recibir a varios clientes, una característica que abre la puerta a que se convierta en otro coworking. La construcción se prolongará, como mínimo, durante 12 meses.
Hasta 18 euros el metro cuadrado
El nuevo edificio de oficinas se ubica en una zona del barrio cuyo precio de arrendamiento oscila entre los 17 y los 18 euros el metro cuadrado. La cifra está alejada de los 24 euros que se pagan en la ubicación top del 22@, situada en plaza de les Glòries, pero implica una revalorización que pocos esperaban hace dos años.
A pocos metros suyos se ubica otra promoción de oficinas que también se iniciará en breve y que implicará un cambio destacado en la zona. Meridia Capital iniciará la reconversión de una manzana de 43.400 metros cuadrados donde había estado la factoría de La Siberia.
La mayoría de este espacio, 32.200 metros, se destinarán a dos edificios de oficinas de alta calidad que ya tienen arrendatario, la multinacional Everis. Los 11.200 metros cuadrados restantes serán uso residencial con otra promoción de lofts de alto standing.
El buen momento del 22@
“Confiamos mucho en el 22@”, ha reconocido a Crónica Global el director de inversiones de real state de Meridia Capital, Víctor Iborra. Asegura que el “Ayuntamiento ha hecho un buen trabajo en impulsarlo como el hub de oficinas de la ciudad”, admite, que es capaz de atraer a firmas de primer nivel y ya no sólo del sector tecnológico, las primeras que aterrizaron en esta zona.
BNP Paribas señaló en su último informe sobre el mercado de oficinas en Barcelona que el 36% de la inversión total que llegó en 2018 a la ciudad fue a parar al distrito del Poblenou. O, lo que es lo mismo, unos 253 millones de euros. También es la zona con mayor perspectiva de iniciar nuevos proyectos.
Savills Aguirre Newman señaló en sus perspectivas del mercado de oficinas que concentra el 61% de la nueva oferta que existe en la capital catalana. La parte negativa es que señaló que el stock total era de tan sólo 6.062.800 metros cuadrados el pasado enero. Falta suelo disponible en la ciudad.