El experiodista y empresario Lalo Azcona anda, a sus 67 años, como niño con zapatos nuevos en su nueva aventura empresarial, la de intentar realizar otra operación de campanillas que añadir a las logradas a lo largo de su rentable carrera.
Ahora, ha puesto todo su empeño, y su dinero, en la confianza de que los robots de Airtificial se conviertan, en un periodo de tiempo no muy largo, en una mina de rentabilidad para sus accionistas. Y no quiere perdérsela.
El tirón de la robótica colaborativa
El actual mercado de la robótica colaborativa ronda los 625 millones de euros, pero la previsión es que en 2025 alcance los 11.000 millones, gracias a la alta tasa de retorno de la inversión y el bajo precio de estos ‘nuevos trabajadores’, que dará como resultado una creciente adquisición de estos robots por parte de pymes en toda clase de sectores industriales.
Por eso, el pasado viernes, tras conocer los resultados de la empresa surgida en noviembre de la unión de Carbures e Inypsa, Azcona se apresuraba a comprar otras 45.000 acciones que, a un precio de 0,17 euros, le llevaban a desembolsar 7.650 euros.
100.000 euros invertidos desde la salida a Bolsa
Sumaba así cerca de 100.000 euros inyectados en la nueva Airtificial desde que el pasado 27 de noviembre de 2018 irrumpiera en Bolsa, cuando el robot ‘Aibell’ tocaba la campana junto a Rafael Contreras, presidente de la tecnológica.
Una nimia cantidad para un empresario, como el asturiano, que lleva tres décadas cerrando negocios de lo más lucrativos desde que dejara de lado la primera línea del periodismo.
'Pelotazo' tras 'pelotazo' desde ERT a Tecnocom
Como aquellos 50 millones de pesetas que invirtió en 1983 en Explosivos Río Tinto (ERT) y que un lustro después se convertían en 3.450 millones de pesetas al entrar en el accionariado el grupo KIO y el empresario Javier de la Rosa. O la venta, en 1987, de Construcciones LAIN a Fiatimpresit, el holding industrial del Grupo Fiat.
Más recientes son las operaciones de desinversión de la naviera de su amigo Fernando Fernández Tapias en 2004, por cuya participación Azcona recibió unos 35 millones de euros. O los casi 70 millones que sumaba a su patrimonio hace dos años en el marco de la OPA de Indra por Tecnocom.
Una sociedad en la que el ovetense había entrado en 1986, cuando se dedicaba a la fabricación de electrodomésticos, y tres décadas después se había convertido en referencia en tecnología punta.
El 6,87% en Airtificial vale 11,5 millones
Ahora, en Airtificial busca repetir la jugada. En el momento del canje de acciones entre Inypsa y Carberus para capitalizar Airtificial, Lalo Azcona, a través de sus sociedades Doble A Promociones e Inverfam 2005, se hacía a finales de noviembre de 2018 con el 6,614% de la nueva compañía, líder en robótica colaborativa y desarrollo de estructuras inteligentes.
Tres meses después, con los 100.000 euros adicionales invertidos, ha aumentado su paquete accionarial en 635.637 títulos, con lo que sus más de 66 millones de acciones, equivalentes al 6,875%, tenían un valor de 11,5 millones de euros al cierre de este martes.
Su agencia de comunicación saca tajada
Además de accionista, Lalo Azcona también es proveedor de servicios de Airtificial. Como lleva haciendo desde hace tres décadas, también aquí ha aprovechado para que Estudio de Comunicación --la agencia que fundara en 1983-- se hiciera cargo de las tareas de comunicación y de asesoría informativa.
Al cierre de su primer ejercicio, de tan solo un mes real desde la fusión entre Carbures e Inypsa, la nueva Airtificial sumaba unos ingresos de casi 44 millones de euros y un Ebitda de 5,3 millones (el 12% de su facturación), para terminar con unos beneficios de 1,1 millones.
Robótica e Hyperloop, grandes bazas
De cara al futuro, la tecnológica cuenta con una cartera de pedidos valorada en 180 millones, y un balance con un patrimonio neto de 123 millones y un fondo de maniobra de otros 19, que garantiza financiar proyectos a corto y medio plazo. Su valor de mercado actual supera los 167 millones de euros, con las acciones en 0,1738 euros.
Junto a la apuesta decidida por la robótica colaborativa, Airtificial tiene como uno de sus proyectos más reconocidos el tren supersónico Hyperloop, llamado a revolucionar esta modalidad de transporte de viajeros.
En el marco de este proyecto son varios los contratos firmados con Hyperloop Transportation Technologies (HTT). El último, el pasado mes de diciembre, para fabricar y ensamblar, por 20 millones de euros, el primer tramo piloto del tubo por el que viajará este tren.