Barcelona en Comú rechazó crear una comisión de estudio para bajar precios en Serveis Funeraris de Barcelona (SFB), la empresa mixta municipal de servicios funerarios.
El gerente municipal, Jordi Martí, declinó convocar una comisión permanente de análisis de los precios de los sepelios el 27 de septiembre de 2016. Citó "la buena gestión de la compañía" y se desentendió del asunto.
Falta de implicación del ayuntamiento
En un documento al que ha podido acceder Crónica Global, el gestor máximo de los comunes en la estructura municipal del Ayuntamiento de Barcelona acudió a una reunión del consejo de administración de SFB, sociedad municipal en la que el consistorio retiene un 15% del accionariado, por un 85% Grupo Mémora.
En aquel encuentro, Martí, que se representaba a sí mismo y al concejal de Presidencia, Eloi Badia, escuchó reproches por "la poca implicación" del Ejecutivo local en la sociedad público-privada. Se afeó a Martí la "poca implicación" municipal en el desarrollo de la empresa y, a renglón seguido, se pidió la "reactivación de la comisión permanente" de SFB. Dicho ente podría, entre otras cosas, haber revisado las tarifas públicas de Serveis Funeraris.
"La empresa funciona perfectamente"
El representante del gobierno local de los comunes contestó de forma muy poco ortodoxa, a tenor de la actual campaña salvaje del BComú para bajar el precio de los entierros en Barcelona. Respondió que habida cuenta de que la participación del ayuntamiento (15%) era muy pequeña y que la empresa, SFB, "funcionaba perfectamente", la dedicación de esfuerzos del consistorio no "debe ser tan relevante como lo es en empresas con un mayor nivel de participación y un menor nivel de gestión".
"Teniendo en cuenta que la empresa cumple con sus compromisos de inversión --continuó Martí-- y cuenta con una buena gestión, el ayuntamiento entiene que no es necesaria una intervención más intensa en la compañía". Por ello, los consejeros de SFB acordaron por unanimidad no reactivar la comisión permanente.
Falta de apoyos
Más allá de las incongruencias de BComú, el proyecto de funeraria exprés que impulsa Badia ha encajado hoy dos reveses más. Los trabajadores de SFB y el Grupo Demócrata, la marca del PDeCAT en la Ciudad Condal, han anunciado protestas y su voto negativo a la iniciativa, respectivamente. Por una parte, el personal de la empresa lamenta que "el mismo ayuntamiento que nos ha privatizado durante años y ahora quiere vender el 15% restante es un gobierno que quiere, a la vez, tener una funeraria pública y privatizar y hacernos la competencia. ¡Y se las dan de municipalistas y de izquierdas!". Mientras que el Grupo Demócrata se opondrá a la iniciativa en el pleno municipal de este miércoles.
Toda vez que BComú se ha quedado sin apoyo suficiente para aprobar el proyecto por cuarta vez, los comunes han iniciado una campaña de chantaje y coacciones por redes sociales contra el PSC de Barcelona. Han utilizado incluso figuras de lápidas y supuestas historias de abusos de empresas funerarias de las que no han dado más datos después de que los socialistas anunciaran su no a la iniciativa.