Borja Prado deja la presidencia de Endesa tras 10 años en el cargo. La semana pasada, el empresario español acordó con el consejero delegado de Enel, Francesco Starace, abandonar la dirección de la eléctrica.
Esta noticia cierra la última etapa del ejecutivo en el grupo, marcada por las complicadas relaciones con Enel, la matriz italiana que le restó responsabilidades, de manera progresiva, en favor del consejero delegado de Endesa, José Bogas.
Relevo
De hecho, será Bogas el que se quede al frente de la eléctrica. El directivo ha acumulado peso en la compañía en los últimos tiempos. Muestra de ello fue su presencia en la reunión en la que se llegó un acordó con el Gobierno sobre el futuro de las centrales nucleares en España.
Cuando Enel tomó el control de la eléctrica española, Prado fue nombrado presidente de la empresa, en marzo de 2009. El grupo italiano desembolsó 42.000 millones de euros por el 92% de Endesa, tras ser privatizada por PSOE --al frente del Ejecutivo-- y PP en los noventa.
Gestión compartida
Prado abandonará la presidencia en la próxima junta general de accionistas, prevista para el próximo abril. Por su labor al frente de la compañía, logró una retribución de 3.184 millones en 2017.