Enganches ilegales, dobles acometidas o manipulación de los contadores son los motivos por los que los fraudes eléctricos no paran de aumentar en España.
La eléctrica Endesa, grupo presidido por Borja Prado, ha echado cuentas de estas prácticas fraudulentas para llegar a la conclusión de que las inspecciones realizadas en 2018 detectaron 65.000 casos de fraude, y que pudo recuperar 600 millones de kilovatios/hora defraudados, el consumo que tiene la ciudad de Palma de Mallorca en seis meses.
Las plantaciones de cannabis colapsan el sumnistro
En esas inspecciones, Endesa se ha topado con un factor que agrava este problema, como es el crecimiento de los cultivos de cannabis, que requieren de enganches ilegales a la red eléctrica y que, en la mayoría de las ocasiones, provoca importaciones interrupciones de suministro en las poblaciones donde se montan estas ‘plantaciones’.
Una vivienda utilizada como plantación "indoor" de marihuana consume el equivalente a 20 viviendas y la concentración de estos cultivos en determinadas zonas llega a saturar la red.
4.000 fraudes denunciados por ciudadanos
En esa labor de inspección, la multinacional energética se congratula de que el uso de las nuevas tecnologías y la colaboración con las Fuerzas de Seguridad y los ciudadanos están permitiendo reforzar la lucha contra este problema. Tan sólo en el último año, las denuncias de ciudadanos ayudaron a destapar cerca de 4.000 fraudes.
A la hora de ver el origen del fraude, Endesa concluye que en cuatro de cada diez inspecciones realizadas se detecta algún tipo de fraude. En el 48% de los casos, se trató de enganches ilegales a la red por parte de usuarios sin contrato y el resto, a otro tipo de fraudes, como dobles acometidas o manipulación de los equipos de medida.
Incendios y descargas
Endesa incide en que, al margen de cifras, el fraude eléctrico es, sobre todo, un problema grave para la seguridad y la salud de las personas, tanto para el propio defraudador como para los que le rodean. En los últimos años, se han registrado numerosos casos de incendios y descargas provocadas por la manipulación de las instalaciones.
La compañía señala que el fraude eléctrico supone un perjuicio para toda la sociedad, ya que se traduce en un incremento de la factura eléctrica del conjunto de los consumidores y puede poner en riesgo tanto la seguridad como la calidad de suministro del resto de usuarios.
Algoritmos contra el fraude
En el marco de su apuesta por la digitalización la compañía está redoblando los esfuerzos en la aplicación de algoritmos avanzados para la detección de fraude, consiguiendo mejorar la identificación de casos y haciéndolo de forma más eficiente.
A la utilización del 'Big Data', se suman las nuevas tecnologías que se han desarrollado en los últimos años para combatir el fraude. Destacan, entre otras, los videoscopios y trazadores, que permiten inspeccionar instalaciones subterráneas, empotradas en las paredes, o inaccesibles a simple vista, para detectar, entre otras manipulaciones, la existencia de dobles acometidas.
46.600 notificaciones de posibles fraudes
En 2018 Endesa recibió más de 46.600 notificaciones de posibles fraudes en la línea telefónica (800 760 20) y el buzón de correo electrónico anomalias@enel.com. Mediante estos canales, los ciudadanos pueden aportar, de manera confidencial, cualquier información sobre anomalías y presuntos fraudes. Estos avisos dieron lugar a más de 10.500 inspecciones y permitieron destapar cerca de 4.000 fraudes.
Además, Endesa Distribución ha puesto a disposición de los ciudadanos en su nueva web un servicio para que estos puedan realizar denuncias acerca de posibles fraudes. Desde su lanzamiento en octubre de 2018, ha recibido una media de 230 denuncias mensuales.