La Casa Batlló gana dinero a espuertas, pero acusa también los efectos del procés en Cataluña. El monumento más rentable de Barcelona --se anotó unos beneficios de 13 millones de euros en 2017-- aumentó la facturación y el excedente neto, pero declaró una caída en el incremento de visitantes: vendió 1.122.513 tiques, un 4% más que en 2016, cuando el incremento interanual fue del 9%.
Según ha informado Expansión, el icono modernista propiedad de la familia Bernat, expropietarios de Chupa Chups, cerró el ejercicio con una facturación global de 27,28 millones de euros, una alza del 12,26% más que el ejercicio anterior. A su vez, el beneficio neto se incrementó el 18,13% para alcanzar los 13,29 millones de euros. Con estos guarismos, la Casa Batlló se convierte en el punto turístico que genera más excedente neto en la capital catalana.
La Casa Batlló recibe más visitantes, pero crece menos
Con lo que respecta a la venta del número de entradas, el inmueble situado en el paseo de Gràcia se anotó 1,12 millones de visitantes, un 4% más que el año anterior. Con esta cifra, la Casa Batlló se mantuvo por encima del millón de visitantes, pero creció menos de la mitad que el ejercicio anterior, cuando aceleró la venta de pases un 9% en comparación con la cifra anotada en 2015.
Imagen de la Casa Batlló en el paseo de Gràcia de Barcelona / CG
Al parecer, el flujo de visitantes al Bien Cultural de Interés Nacional se estancó tras el atentado de Las Ramblas de agosto de 2017, rompiendo una tendencia ascendente hasta entonces. Según el Ayuntamiento de Barcelona, el impacto global del golpe yihadista en el destino fue de una caída de visitantes del 2% y del 1,9% en las pernoctaciones. En la casa modernista, ese estancamiento turístico se notó también tras el referéndum ilícito de secesión del 1 de octubre y la declaración unilateral de independencia (DUI) fallida del 27 de octubre.
Dividendos de 11,5 millones
Pese a ese pequeño traspiés, el monumento, que se encuentra en el mismo bulevar que La Pedrera, otro de los iconos modernistas de Barcelona, es una auténtica máquina de hacer dinero para la familia Bernat. Los antiguos dueños de Chupa Chups, marca de caramelos que fundó Enric Bernat y que adquirió la firma italiana Perfetti Van Melli en 2006, se embolsaron dividendos por valor de 11,5 milllones de euros a cargo de los resultados de 2017.
El pago se ha formalizado por vía de la compensación de un crédito concedido por Bernat Family Office a la mercantil que explota la Casa Batlló. En los ejercicios anteriores, la misma cifra totalizó 18 millones de euros repartidos en los años fiscales de 2015 y 2016.
De cara a este ejercicio, la estirpe barcelonesa espera repetir resultados positivos debido a la mejor coyuntura económica. No obstante, detecta una tendencia "negativa" en la cifra de visitantes, como ya ocurrió en 2017. Ello se repite en otros monumentos y puntos turísticos de la Ciudad Condal.