La expectación que Seat ha creado desde que lanzó al mercado su primer modelo de vehículo utilitario deportivo (SUV, de las siglas de Sport Utility Vehicle), el Ateca, en 2016 ha llegado a su punto álgido este martes. La automovilística española ha presentado en Tarragona el modelo Seat Tarraco, el hermano mayor de los todocaminos urbanos que han catapultado los resultados del grupo. El nuevo coche está llamado a ser “el emblema de la marca”.

El presidente de la compañía, Luca de Meo, ha declarado que la fuerte apuesta que han hecho en este segmento responde a la demanda de los usuarios. Ha explicado que los especialistas del sector señalan que el mercado SUV crecerá más del 40% hasta 2025. La automovilística está muy bien situada en este sector, ya que además del Ateca y el Tarraco, cuenta con un hermano menor, el Arona, con unas características mucho más urbanas. 

La firma integrada en Volkswagen ya ha completado su ofensiva para situarse en una posición destacada en este segmento de vehículos. El precio ha sido su principal baza para situar sus SUV a la cabeza de las ventas en varios mercados. La política se ha mantenido con el Tarraco, que saldrá al mercado en los primeros meses de 2019 con un coste base de 30.000 euros. 

Primer coche con nombre de ciudad catalana

Más allá de la estrategia comercial, el nombre elegido para el SUV de mayor tamaño supone que Seat tenga por primera vez una ciudad catalana en el nomenclátor de sus vehículos. La designación ha estado rodeada de polémica. Parte de la sociedad quiso dar una lectura política en la elección. Sin embargo, el presidente de la compañía ha defendido que el proceso de elección fue “transparente y limpio”.

“La gente propuso el nombre, se decidió entre más de 10.000 propuestas y este fue el elegido”, ha resaltado, aunque no niega que en la compañía “también nos gusta”. El nombre “refuerza nuestra identidad” como marca española y “es adecuado para este SUV” ya que traslada la “fuerza” y la “capacidad” que quieren dar en el modelo todocamino más grande de la gama de Seat. Mide 4.7 metros de longitud y 1.6 metros de altura, con el consiguiente gran espacio del habitáculo interior con cinco o siete asientos, según la configuración deseada. 

También levantó polvareda la decisión de que no se fabricase en la planta de Martorell. La elección de otra planta fue criticada por parte de la plantilla, aunque De Meo ha recordado este martes que la localidad “nunca ha sido una opción” en el proceso de fabricación. Ha justificado que el coste de adaptar sus instalaciones a las características de este modelo hubieran lastrado la rentabilidad. 

Tecnología y diseño

El coche está pensado con una “mirada hacia el futuro”, tal como ha destacado el responsable de diseño de la compañía. La línea del nuevo vehículo se complementa con la de los modelos Altea y Arona, los dos SUV “hermanos pequeños” del Tarraco. La automovilística asegura que el nuevo modelo ha sido un reto en su proyección, ya que se quería llegar a un vehículo con aspecto deportivo pero que encajara en un ambiente urbano. Todo ello, con unas dimensiones destacadas. 

La idea inicial ha sido la de combinar “deportividad y funcionalidad” a través de la unión entre el diseño y la aplicación de sistemas tecnológicos aplicados a la conducción. El vicepresidente de desarrollo de Seat, Matthias Rabe, ha destacado que la conectividad es “esencial” en un vehículo para la gran mayoría de los usuarios y que, por ello, han aplicado en el modelo una interfaz intuitiva y que potencia “todo lo que necesita el usuario” para una conducción más sencilla. Algunos de los puntos destacables en el terreno tecnológico han sido, por ejemplo el sistema de asistencia --“tiene todo lo que puede pedir el cliente”, ha declarado el ejecutivo alemán-- o la aplicación de leds tanto en los faros exteriores como en los pilotos y el sistema de iluminación interior.

Se espera que impulse la cuenta de resultados del grupo del próximo ejercicio. En el actual, se espera llegar a un récord en las ventas. Y los SUV que ya están en el mercado son en gran medida responsables de la buena marcha de la compañía.