CaixaBank obtuvo en el primer semestre de 2018 un beneficio atribuido de 1.298 millones de euros, lo que representa un incremento del 54,6% respecto al mismo período del año pasado. Así lo ha informado la entidad este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El banco ha explicado que el resultado se apoya en el crecimiento de los ingresos, con un aumento del margen bruto del 8,7% hasta los 4.654 millones. El impulso proviene de los ingresos core del negocio (margen de intereses, comisiones, ingresos del negocio de seguros, puesta en equivalencia de SegurCaixa Adeslas y las participaciones de BPI Bancaseguros), que han alcanzado los 4.091 millones.

Además de la mejora del negocio y el incremento de clientes, Caixabank consigue este resultado gracias a la reducción de las dotaciones y provisiones, o el dinero que se guarda para imprevistos. La entidad financiera con sede en Valencia, ha cerrado un acuerdo reciente para dar carpetazo al 80% de su ladrillo, aunque el balance se verá en los próximos resultados. 

Rentabilidad

La rentabilidad del Grupo CaixaBank (Rote) ha mejorado hasta el 10,4% --en línea con el objetivo del Plan Estratégico para 2018 de entre el 9% y el 11%--, mientras que el Rote recurrente del negocio bancario y asegurador se ha situado en el 12%, con un resultado de 1.121 millones. El margen de intereses del primer semestre del grupo asciende a 2.432 millones (3,5% más respecto al primer semestre de 2017), lo que ha atribuido a la mejora de la rentabilidad del crédito, la gestión de la financiación minorista y el ahorro en los costes de la financiación institucional, y los ingresos por comisiones han alcanzado los 1.293 millones, un 3,3% más respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.

Han descendido en un 5,9% las comisiones bancarias, de valores y otros, mientras que se mantiene la tendencia de crecimiento de las comisiones de los fondos de inversión (18,4% más), planes de pensiones (9,4% más) y comercialización de seguros (26,7%).

Más créditos

El crédito bruto a la clientela se sitúa en 225.744 millones, un 0,8% más que el año anterior, y la cartera creció un 1,6% (3.366 millones); el crédito a particulares sano aumentó un 1,2% en el año (6,3% en el trimestre), impulsado esencialmente por el crédito al consumo en España (5% en el trimestre y 10,7% en el año), y la nueva producción de crédito hipotecario creció un 8%.

Los recursos de clientes han crecido hasta los 366.163 millones a cierre de junio de 2018, un 4,8% más, con un aumento del 6,1% de los recursos en balance y del 1,8% de los activos bajo gestión, que alcanzan los 98.316 millones (1,2% en el trimestre).

Menos morosidad

La ratio de morosidad de CaixaBank se ha reducido hasta el 5,3% (6,5% en junio de 2017 y 6% en diciembre de 2017), y los saldos dudosos han descendido hasta los 12.714 millones.

Las pérdidas por deterioro de activos financieros y otras provisiones disminuyen un 57% respecto al mismo periodo de 2017, entonces recogían impactos extraordinarios negativos asociados a prejubilaciones y al saneamiento de la exposición en Sareb, y alcanzan los 531 millones.

El Grupo CaixaBank ha alcanzado una ratio Common Equity Tier 1 (CET1) fully loaded del 11,4%, tras el impacto extraordinario por la recompra de intereses minoritarios de BPI y del 51% de Servihabitat, en línea con el rango fijado en el Plan Estratégico, de entre el 11% y el 12%, y el capital total, en términos fully loaded, alcanza el 15,7%, por encima del objetivo del 14,5%.