El futbolista Gerard Piqué no atraviesa su mejor momento, tanto en el ámbito deportivo como en sus negocios privados. Tras el sonoro fracaso de la selección española en el Mundial, que además significa su último campeonato del mundo con el combinado nacional, ahora su empresa de videojuegos acaba de bajar la persiana, ahogada por las pérdidas. En los últimos seis años, cinco ha tenido quebrantos de bulto.

La compañía de marras se llama Kerad Games y tiene su cuartel general en la calle Electricitat de Sant Just Desvern, muy cerca de las instalaciones del FC Barcelona.

Kerad Games se constituyó a finales de 2011 con un capital inicial de 50.000 euros. Su objeto social es el “diseño, producción, ejecución, desarrollo y comercialización de juegos online para todo tipo de redes y dispositivos”. Su padre, Joan Piqué Rovira, asumió el cargo de administrador único.

Cambio de ejecutivo

Desde entonces, Kerad ha lanzado al mercado tres juegos para móviles: Golden League, Trivia League y Stop Goal. El primero tuvo un éxito considerable y llegó a contar con usuarios registrados en los cinco continentes. Pero los buenos datos de difusión no se tradujeron en ventas. El año que mayor volumen de facturación consiguió fue 2015, con 1,2 millones. Los resultados han sido negativos en todos los ejercicios salvo en 2014, cuando ganó la pírrica suma de 5.663 euros.

Las primeras señales de que el negocio navegaba a la deriva afloraron el año pasado, cuando el máximo directivo de la compañía, el consejero delegado Alberto Guerrero Berruezo, abandonó Kerad para fichar por la multinacional Riot Games. Guerrero era el impulsor de la plataforma de eSports, el nuevo negocio en el que pretendía entrar Kerad para superar sus crónicos problemas de rentabilidad.

Piqué le sustituyó por Javier Alonso, quien anteriormente ejerció de directivo en la compañía Dorna, organizadora del mundial de MotoGP. Alonso ha durado un año en el puesto, hasta que Piqué ha bajado la persiana de su negocio.

Un portavoz oficial del futbolista explica a Crónica Global que Alonso dirige ahora los negocios de eSports de Piqué, englobados en una división titulada Cosmos. Las principales actividades de Cosmos son Tenis, Cosmos Studios y eSports Media Right. 

Ampliaciones de capital

Kerad Games se ha financiado a golpe de ampliaciones de capital, desembolsadas por la sociedad de cartera del futbolista Kerad Holding. Hasta ocho desdobles ha acometido, para elevar los fondos desde los 50.000 euros iniciales hasta 1,8 millones.

Todos los recursos se han consumido y Piqué ha decidido que no va a inyectar más capital, por lo que Kerad se liquida, disuelve y desaparece del mapa para siempre. Las pérdidas superan los 2 millones, totalmente irrecuperables. El cierre ha implicado el despido de sus 35 empleados. El grueso de ellos se ha recolocado en Cosmos. Una fuente de la empresa confirma el final de Kerad Games: "Estamos en pleno proceso de liquidación".

Una inscripción registral aparecida este jueves en el Boletín Oficial del Registro Mercantil comunica que cesa el consejo de administración. Estaba formado por el futbolista, su padre, Arturo Canales Camps, más el secretario Joan Mas Peidró. El padre y Canales asumen ahora los cargos de liquidadores de los restos de la sociedad.