Damm cerró las cuentas de 2017 con un aumento de los beneficios de un 11%, hasta alcanzar los 112,5 millones de euros. La compañía cervecera catalana ha mejorado sus resultados económicos impulsada por un incremento de las ventas también de un 11%. En total, facturó 1.163 millones el ejercicio pasado. El resultado bruto de explotación (Ebitda) ha crecido más –el 15,3%–, hasta los 218,55 millones, mientras que el beneficio de explotación se situó en 146 millones, el 21,6% más.
La empresa atribuye el crecimiento a la mejora de la economía española, que ha ido acompañada de una recuperación del consumo interno. Además, desde el grupo que aglutina marcas como Estrella y Voll-Damm, dirigido por Jorge Villavecchia, destacan el esfuerzo de internacionalización, que se centró el año pasado en Reino Unido, Canadá, EEUU, China, Suecia, Chile y Australia. En estos países cuenta con fuerza comercial propia.
Más inversiones y más deuda
Mientras que las inversiones subieron un 36% con respecto a 2016 –hasta alcanzar los 112,9 millones–, la deuda neta también creció. Lo hizo en concreto un 73% y se situó en 93,8 millones, lo que equivale a 0,43 veces el Ebitda. La deuda bancaria a corto y largo plazo ascendió a 262,8 millones, aunque la caja contaba con una cifra superior a cierre de 2017, un total de 291 millones.
El informe anual que elabora la compañía de cara a la junta de accionistas del 26 de junio indica que los costes para la compañía aumentaron. Esa variable responde a un “incremento de la producción sin retorno y de la introducción de nuevos formatos”. Sin embargo, una disminución del precio de la cebada compensó en parte este aumento de los gastos.
Participación en Ebro Foods
Damm elevó su participación en Ebro Foods, el gigante español de arroz y pasta. Compró 92.000 acciones, lo que aumenta su control ligeramente, del 11,45% al 11,51%. Este paquete de títulos se valoraba el lunes en torno a 372 millones en la Bolsa de Madrid.
La plantilla del grupo aumentó un 17%, lo que supuso superar los 4.000 empleados. Así, el gasto en personal subió un 14% hasta quedarse a las puertas de los 161 millones.