Guardar y prestar dinero. Este es el negocio bancario tradicional, el que han propiciado las entidades que todos conocemos y que ahora está en horas bajas por la política de dinamización económica que marca el Banco Central Europeo. Los tipos bajos les empujaron a ampliar otras vías de ingresos ligados a la actividad aseguradora o la inmobiliaria una vez pasado lo peor de la crisis. Pero ni el avance ni la rentabilidad que se ha conseguido por esta vía ha sido el ideal.
La guinda del pastel lo pone la aparición de una competencia inesperada. La amenaza de las multinacionales. Gigantes de otros sectores que empiezan a prestar servicios financieros para ganar dimensión.
¿Qué papel tendrán los bancos en ese contexto? Desde el comparador de productos financieros HelpMycash.com analizan cómo se podría producir la entrada de estas empresas en el negocio de la banca.
Facebook y Amazon
Uno de los casos más claros en España es la entrada de Facebook en el juego financiero. La principal red social ingresó hace pocos meses en el Registro Oficial de Entidades del Banco de España. No será un banco en sí. La operativa que tendrá es muy limitada. Permitirá enviar y recibir dinero.
Hace pocas semanas saltó el rumor de que Amazon estaba interesado en comprar una de las entidades más importantes de Estados Unidos. El gigante del negocio electrónico no ha confirmado este extremo.
Carrefour y Orange, bancos en Francia
En los hipermercados Carrefour de España se puede contratar una tarjeta de crédito con financiera Carrefour EFC. En su país de origen, Francia, ya ha lanzado una cuenta bancaria, lo que lo convierte en una entidad como tal. Dada esta situación, no sería de extrañar que expandiera los servicios al resto de mercados.
Lo mismo ocurre con Orange. El operador galo abrirá oficialmente a mediados de mayo un banco móvil desde el que se podrán contratar una gran variedad de productos financieros.
Resistencia al primer envite
Las empresas que han puesto el pie en el sector financiero por el momento no desempeñan exactamente las mismas funciones que las entidades tradicionales. Ahora sería imposible domiciliar la nómina en Facebook o Orange.
Pero se debe tener en cuenta que la amenaza surge en un contexto en el que convive la operativa digital con la tradicional, sin un claro vencedor. Los bancos no deben quedarse de brazos cruzados. A la velocidad que evoluciona el sector de las fintech y las posibilidades que ofrece actualmente la tecnología, realizar cualquier operación bancaria en Facebook no sería una locura.
De hecho, por mucho que alardeen de su adaptación a la era digital, su transición es mucho más lenta que la transformación emprendida por estas multinacionales.
Cambio tecnológico
El comparador recuerda que las entidades financieras no deberían considerar la transición hacia un entorno digital como un problema, sino como una oportunidad para reorientar su negocio. Para ello, deberían innovar y añadir nuevos servicios que fomentasen la competencia y proporcionasen un mejor servicio al cliente.
Deben adaptarse a los nuevos hábitos de sus clientes, afirma la plataforma. Cierran oficinas y se trasladan hacia un mundo más tecnológico, pero en breve deberán competir con multinacionales 100% digitalizadas y que han demostrado que son más ágiles ante los cambios de consumo de la sociedad. Un reto que se debe abordar sin demora.