Société Générale ficha a Juan María Nin para su consejo de administración

Justo dos años después de ser despedido por Isidro Fainé como vicepresidente y director general de Caixabank, Juan María Nin regresará al sector financiero en París, en Société Générale. Esos dos años de lejanía del sector bancario son los que Nin pactó con su antigua casa para embolsarse una indemnización de 15,1 millones de euros brutos.

El ejecutivo bancario será propuesto como consejero del grupo francés por un periodo de cuatro años. La propuesta se someterá a aprobación de la junta de accionistas de Société Générale que tendrá lugar el próximo 18 de mayo. Nin no firmará hasta septiembre próximo su vinculación con el banco galo, una vez rebasados los dos ejercicios completos de no competencia, según ha podido confirmar Crónica Global.

A distancia de Donato González

A sus 62 años, Nin regresa a su sector profesional natural. Lo hace por la puerta grande y en calidad de consejero independiente de un gran banco europeo con presencia en todos los países del área y en las principales plazas del mundo. Tras su abrupta salida de Caixabank nadie en el sector esperaba que un ejecutivo con su experiencia y edad pudiera regresar al mundo bancario con un cargo de un nivel y relevancia similar a los ejercidos hasta que resultó despedido. 

Aunque Nin no tendrá encomendadas tareas relativas a España (la filial de Société Générale está pilotada desde Madrid por el polémico banquero Donato González, amigo de Florentino Pérez y conocido en la capital por sus gustos aristocráticos y cacerías con los Albertos), es inevitable que el que fuera primer directivo de Caixabank sea el principal informante de Société Générale sobre qué se cuece en el mercado financiero ibérico y, en cierta medida, interlocutor con algunos poderes y clientes.

Explicar la banca minorista y las nuevas tecnologías

¿Qué ha buscado el grupo francés con el fichaje del bancario barcelonés? “Principalmente, mi experiencia en dos puntos: haber ejercido como banquero minorista con éxito y la capacidad de entender ese negocio”, explica Nin al ser interrogado por este medio sobre su nuevo destino.

No es la única de las razones por la que Société ha optado por lanzar sus redes a Nin. “Les interesa --prosigue-- contar en el consejo con alguien que entienda y haya puesto en práctica lo que se ha dado en llamar fintech [innovación y nuevos usos y costumbres en la banca vinculados a la tecnología], pero también la experiencia corporativa por haber participado en compras, integraciones y fusiones”.

El que será en septiembre nuevo consejero del banco abandonó la primera posición ejecutiva de Caixabank por expreso deseo de su presidente, Isidro Fainé. Al máximo mandatario del grupo barcelonés le inquietaron los movimientos de Nin en clave sucesoria y cómo se atribuía méritos en la gestión, que según el presidente no le correspondían.

Fainé jamás se ha pronunciado en público contra Nin, aunque sí lo ha hecho ante sus próximos, con quienes no ha dudado en confesar el carácter muy ambicioso del que fuera su número dos. Antes del grupo La Caixa, Nin fue consejero delegado de Banco Sabadell (sus relaciones con el presidente Josep Oliu también fueron tensas en la última etapa) y antes alto cargo del Santander Central Hispano.