Bruselas se resiste a fijar un precio mínimo para la leche

Bruselas no aceptará establecer un precio mínimo para la leche, como quiere hacer el Gobierno francés, aunque reconoce que existe un problema serio en este campo y que tiene que ver con la presión de los envasadores y fabricantes de derivados lácteos sobre los productores. 

Desde que en abril pasado finalizó la política agrícola común que durante 30 años trató de mitigar los efectos de la sobreproducción con una política de cuotas que la limitaba, el precio de la leche no ha dejado de caer; incluso en mercados como el español, donde la producción no supera el 70% de la demanda.

Un precio que no cubre los gastos

De hecho, el precio medio que los fabricantes pagan a los ganaderos raramente supera los 0,36 céntimos por litro, que es el coste de producción. El Gobierno español ha tomado algunas medidas, incluida una duración mínima de los contratos y un plazo también mínimo para que los fabricantes avisen del cambio de condiciones a sus proveedores.

La Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC) multó en marzo al cártel español de la leche con casi 90 millones de euros por pactar estrategias de precios e intercambio de información. Entre las nueve empresas y las dos asociaciones sancionadas figuran todos los grandes del sector; Danone (23,2 millones), Puleva, Pascual.

Estudio de competencia 

Ante esta situación y sabiendo que París se propone establecer un precio mínimo para su mercado, el Gobierno español anunció la semana pasada que ha pedido un informe a la CNMC para saber si la legislación española y la europea permitirían una medida de esas características.

La Comisión Europea admite que existe "volatilidad de precios" en el sector y está "al tanto de la situación difícil a la que se enfrentan los productos de diferentes sectores en varios estados miembro" pero ha descartado a priori la idea de introducir un precio mínimo.

Debate sobre la crisis del sector

"No creo que estemos en un punto de definir la idea de un precio mínimo para la leche pero discutiremos las ideas que estén sobre la mesa en el próximo Consejo de Agricultura" convocado por la presidencia luxemburguesa de la UE el próximo 7 de septiembre en Bruselas de forma extraordinaria para discutir la crisis en el sector lácteo y otros como el porcino, ha explicado en rueda de prensa el portavoz de la Comisión Europea, Enrico Brivio.

El portavoz comunitario ha explicado que "las protestas también están dirigidas a la cadena de suministro". "Y esto también se debe analizar porque los agricultores también merecen ser pagados un precio justo por su producción", ha puntualizado.

Además del final de la anterior política agrícola común, el sector lácteo ha sufrido las consecuencias del bloqueo del mercado ruso, además de la ralentización de las importaciones de cierto grandes mercados, como el chino.