Por primera vez en los últimos nueve años, el dinero enviado a España por parte de los emigrantes españoles ha superado las remesas de los inmigrantes extranjeros que viven en España hacia sus países de origen, según datos que ha hecho públicos el Banco de España.
Según estas cifras, el segundo trimestre de 2013 los emigrantes españoles enviaron a España un total de 1.591 millones de euros, mientras que los extranjeros que viven en España enviaron a sus países 1.563 millones. De hecho, este saldo favorable había sido la tónica general hasta la llegada masiva de inmigrantes de la última década. Concretamente, hasta septiembre del 2004, cuando las remesas desde España en el extranjero fueron superiores por primera vez.
Desde entonces y hasta 2007 -el año anterior a la crisis-, la tendencia se fue acentuando. Y a partir de este momento se fue invirtiendo, por el triple efecto del aumento de la emigración de españoles, el regreso de inmigrantes a sus países de origen, y los efectos de la crisis en muchos de los inmigrados que no han marchado.