Nitbus, el cuento de nunca acabar
No estaba previsto incluir en el orden del día la adjudicación del Nitbus del norte de Barcelona en el pleno del Área Metropolitana. Sin embargo, al final se coló de rondón en el punto 20, aunque sin más novedades.
El concurso que ganó la empresa ALSA sigue sin adjudicarse desde hace dos años. Ni los informes favorables de los servicios técnicos y jurídicos de la AMB, ni las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña han sido suficientes para que la dirección de la AMB lo adjudique. El motivo es que la otra empresa en liza, TUSGSAL, ha recurrido este concurso con el peregrino argumento de que no se ha publicado en la Unión Europea.
Antonio Balmón, vicepresidente de la AMB, ha alegado para no adjudicarlo que se estaban estudiando las alegaciones presentadas por ALSA. De esta forma la entidad metropolitana sigue un mes más mareando la perdiz y viendo cómo soluciona el conflicto político que se esconde tras el fracaso de TUSGSAL en el concurso. Un conflicto político porque TUSGSAL es una empresa de economía social vinculada al PSC y su sede está en Badalona, gobernada por los aliados de Ada Colau. Eso sí, esto no la exime de cumplir los pliegos del concurso, que no cumplió, y perdió.