Dos de los riggers contratados por Fira Barcelona montan los escenarios del Sónar / EFE

Dos de los riggers contratados por Fira Barcelona montan los escenarios del Sónar / EFE

Vida

El juez da la razón a Fira Barcelona con la contratación de montadores

Las medidas cautelares reclamadas por los 'riggers' en huelga han sido desestimadas, lo que asegura la celebración del festival Sónar "con normalidad", según la organización

16 julio, 2019 10:11

La contratación de montadores de escenario --riggers-- por parte de Fira de Barcelona mientras un grupo de estos están en huelga contra la institución es legal. Así lo ha valorado el magistrado del juzgado de lo social número 27 de Barcelona, el cual ha tramitado la petición de los montadores contra Fira, a la que acusaban de vulnerar su derecho al paro laboral. 

La institución ferial alegaba que el contrato que tenía con los técnicos de UTE Rigging --los que están en huelga-- no tenía cláusula de exclusividad, por lo que el acuerdo laboral con otras empresas que presten el mismo servicio era legal. Esta fue la medida que adoptó para tener listos los escenarios del Sónar 2019, cuyo comienzo está previsto mañana. Fuentes de la organización de este evento de música electrónica y experimentación aseguran que el festival se celebrará con normalidad.

Medidas cautelares

El grupo de trabajadores en huelga, cuyo trabajo consiste en montar los escenarios y elementos aéreos que los revisten, se dirigía a la Justicia para pedir medidas cautelares contra la decisión empresarial de contratar a terceros para suplantarles durante los paros laborales.

Sin embargo, el titular de lo social ha desestimado tal petición ya que considera que la actuación de Fira de Barcelona se ajusta a derecho y no hay motivo que "justifique la adopción de una medida prohibitiva" que daría como resultado "la paralización de las obras de instalación del escenario, luces, equipos de sonido, etc... inherentes al festival Sónar".

Impacto del Sónar

El magistrado dedica una parte de su argumentación jurídica a destacar las consecuencias --económicos, laborales y sociales-- de no celebrar este macrofestival. En el auto, insta a "buscar soluciones legales que permitan celebrar el festival sin atacar el derecho de huelga" ya que no hacerlo sería "un uso desproporcionado en el ejercicio de este derecho fundamental". 

Por una parte, valora que la cancelación del Sónar generaría "perjuicios irreparables y muy elevados" para los futuros asistentes "que tienen en su agenda la participación en un evento de esta magnitud desde hace muchos meses". También hace mención el juez a la cuenta de resultados de este festival, que se vería "sin duda" afectada. En tercer lugar, recuerda a los riggers que "ejercer legítimamente el derecho a huelga de unos cuantos, no puede nunca poner en peligro la viabilidad del lugar de trabajo de muchos otros trabajadores, que también merecen la tutela de los tribunales de justicia".