Imagen de archivo de un pantano / CG

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Vida

El 2017 es el año, del siglo XXI, con menos agua embalsada al comenzar el verano

La falta de lluvias acumulada, las altas temperaturas y el descenso hídrico en verano agudizan la sequía

25 junio, 2017 13:21

Los embalses españoles se encuentran al 54,8% de su capacidad en la semana en la que ha comenzado el verano, lo que sitúa 2017 como el año del siglo XXI con menos agua embalsada en esta época y el noveno de los últimos 41 años, según datos del Ministerio de Alimentación, Agricultura y Pesca y Medio Ambiente.

Así, desde 1976, el año en el que la reserva estaba más menguada en estas fechas, concretamente al 40% de su capacidad, fue 1995.

Le siguen 1992, con un 46%; 1993, con un 48%; 1982, con un 49%; 1976, con un 51%; 1993 y 1984, con un 52%; y 1989, con un 54%.

13% menos de lluvias 

Las lluvias acumuladas en el conjunto de España en lo que va de año hidrológico (1 de octubre de 2016 a 30 de septiembre de 2017) se sitúan un 13% por debajo de sus niveles normales y el presente verano, que será "más caluroso de lo normal", ha llegado después de la primavera más calurosa en 52 años y un 23% más seca de lo normal, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Además, los embalses españoles están al mencionado 54,8% de su capacidad total, puesto que almacenan 30.678 hectómetros cúbicos de agua, frente a los 40.771 de las mismas fechas del año pasado, es decir, en torno a un 20% menos, y en la última semana han perdido 631 hectómetros cúbicos, el 1,1% del total, según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.

Por ámbitos, la reserva en el Cantábrico Oriental se encuentra al 83,6%; en el Cantábrico Occidental, al 88,0%; en Miño-Sil, al 65,7%; en Galicia Costa, al 73,2%; en Cuencas internas del País Vasco, al 76,2%; en Duero, al 49,0%; en Tajo, al 49,6%; en Guadiana, al 56,4%; y en Tinto, Odiel y Piedras, al 88,6%.

Además, en Guadalete-Barbate se sitúa al 52,5%; en Guadalquivir, al 48,6%; en Cuenca Mediterránea Andaluza, al 46,1%; en Segura, al 28,5%; en Júcar, al 36,7%; en Ebro, al 74,6% y en las Cuencas internas de Catalunya, al 82,3%.

Primavera "extremadamente cálida"

La portavoz ha indicado que la situación se produce después de la primavera "extremadamente cálida", la más calurosa en 52 años, desde 1965, y también en lo que va de siglo.

En su conjunto, el trimestre comprendido entre el 1 de marzo y el 31 de mayo de 2017 tuvo una temperatura media de 15,4 grados centígrados, esto es, 1,7 grados centígrados más que la media de la estación, respecto al periodo de referencia 1981-2010.

En cuanto a las precipitaciones, ha informado de que la primavera tuvo 133 litros por metro cuadrado de media, lo que supone un 23% menos que las lluvias normales en el trimestre.

En conjunto, marzo fue un mes húmedo, con un 29% más de lluvia; le siguió un abril muy seco (con una precipitación del 60% menos de lo normal) y terminó con un mayo seco, con un 23% menos de precipitación.

El suministro no está en riesgo

Por su parte, la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha valorado que "no es una de las peores sequías de los últimos años en términos globales de toda España", pero "sí es especialmente importante en algunas cuencas".

La ministra ha informado de que en el conjunto de España ha llovido un 13% menos de lo normal en el presente año hidrológico y que el nivel medio de los embalses están en torno a un 52%, cuando la media de los últimos cinco años ha estado entre un 68 y un 70%, "casi 20 puntos por debajo".

En todo caso, ha garantizado que no hay riesgo de abastecimiento de agua para la población, pero sí se han establecido ya restricciones en el Duero para la agricultura.