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Los Mossos d'Esquadra decomisaron 580 armas de fuego en el primer semestre de 2025 en Cataluña, a razón de más de tres al día. Del total de armas de fuego intervenidas entre enero y junio, 283 fueron cortas y las otras 297, largas, ha detallado la consellera de Interior, Núria Parlon, en una respuesta parlamentaria por escrito.

Por su parte, el jefe del Grup Especial d'Intervenció (GEI) de la policía catalana, cuya identidad es anónima, ha asegurado que la presencia de armas de fuego en operativos policiales contra redes criminales, como asaltos y entradas en domicilios con detenciones peligrosas, es más elevada desde hace unos cinco años: "La amenaza cada vez es mayor".

A pesar de detectar este incremento exponencial de armas de fuego, indica que esto no se debe traducir en una "señal de alerta", ya que asegura que los agentes cada vez están más entrenados y preparados para afrontarlo.

Los datos ofrecidos por la Generalitat cuantifican en 1.191 las armas de fuego intervenidas por los Mossos en todo 2024, de ellas, 469 cortas y 722 largas.

90 servicios

De hecho, en lo que va de 2025 el GEI, equipo conformado por 48 agentes, ha sido requerido en 90 ocasiones, frente a las 185 de 2024, de las cuales el 37% han estado relacionadas con la protección de actos y preventivos; el 45%, con entradas y detenciones peligrosas; y el 8%, con el traslado y protección de personas importantes.

El jefe del Grup Especial d'Intervenció de los Mossos d'Esquadra en su despacho, ubicado en el Complex Central Egara David Zorrakino Europa Press

Preguntado por cómo su equipo gestiona la tensión en operativos donde puede haber intercambio de disparos, en una entrevista con Europa Press, el jefe del GEI indica que hay diversas formas de "neutralizar la amenaza", ya que hay ocasiones en las que tienen margen de tiempo para evaluar, abrir una negociación y evitar el enfrentamiento directo, pero hay veces que la respuesta tiene que ser otra.

"Nosotros no matamos, no es nuestra voluntad; nosotros lo que queremos es neutralizar la amenaza, asegurar la zona y poder garantizar la seguridad del entorno", subraya.

Plantaciones de marihuana

Sobre las armas de fuego, "antes no era tan habitual verlas en un registro de una plantación de marihuana", ejemplifica el líder del GEI, que señala que el grupo que él dirige, por tratarse de una unidad de élite preparada para hacer frente a este tipo de operativos, solo se activa cuando hay indicadores de riesgo por posible presencia de armas de fuego o cuando la situación es altamente peligrosa.

Estas redes custodian la mercancía de droga con armas de fuego para repeler posibles intervenciones policiales, y también vuelcos de otras bandas que intentan robársela: "Es un juego a tres bandas. Los criminales, a la que detectan algún movimiento, como ha pasado en alguna ocasión, disparan pensando que son grupos rivales y es la policía".