La investigación sobre la muerte de Isak Andic, fundador de Mango, avanza con nuevas declaraciones de su entorno más próximo. Los Mossos d’Esquadra han tomado testimonio a las hermanas de Jonathan Andic y a su psicoterapeuta, cuya intervención se ha limitado por el secreto profesional.
Según ha publicado El País, la policía mantiene abiertas todas las hipótesis sobre la caída mortal de Andic en Montserrat el pasado 14 de diciembre de 2024. Aunque el suceso pudo ser accidental, los investigadores no descartan un homicidio y analizan al detalle la relación entre el empresario y su hijo mayor, que estaba con él durante la excursión.
También ha declarado el presidente de Mango, Toni Ruiz, que asumió las riendas de la empresa tras el fallecimiento del fundador. Los interrogatorios buscan reconstruir el clima familiar y laboral previo a la muerte, marcado por etapas de tensión entre padre e hijo debido a la gestión de la compañía.
Contradicciones bajo lupa
Fuentes del entorno familiar insisten en que la investigación "no se dirige contra ninguna persona en concreto" y recuerdan la plena colaboración de todos los allegados. Jonathan Andic, por su parte, ha declarado dos veces ante los Mossos como testigo, aunque algunas contradicciones en sus relatos han alimentado las dudas de los investigadores, que ya le han comunicado formalmente que figura como investigado en la causa.
