El Juzgado penal número 1 de Figueres ha dictado sentencia condenatoria contra J.M.S.M., el conductor ebrio que atropelló mortalmente a Daniel Mauriz, el joven de 19 años que murió mientras volvía de trabajar en patinete eléctrico, y se dio a la fuga, en Empuriabrava, la madrugada del 10 de octubre de 2021.
El bufete Vosseler Abogados, que ejerce la acusación particular en nombre de la familia del fallecido, ha anunciado este lunes que presentará de manera inmediata un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Girona con el objetivo de declarar la nulidad de esta sentencia y poder agravar la pena final impuesta para el acusado. En este sentido, insisten en la "inclusión del delito de conducción temeraria" en el fallo.
Con este caso, el despacho de abogados espera llevar al Congreso de los Diputados una solicitud de reforma legislativa que introduzca la figura del "dolo eventual" en hechos de conducción temeraria bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Homicidio vial
Vosseler Abogados busca que "estos sucesos se traten como un homicidio doloso y no como una imprudencia simple", ha destacado en un comunicado. Gracias a la propuesta de una nueva categoría de delito, el "homicidio vial", sería posible imponer "penas mucho más elevadas".
Es por ello que la acusación ha liderado desde 2022 una recogida de firmas para llevar la causa, sobre la que ya se ha hecho investigación académica, a la cámara legislativa.
Dos años de condena
"La condena, como en otros casos similares, deja un sabor agridulce a los familiares de la víctima por no ser comparable a la cadena perpetua de dolor que sufrirán toda la vida", ha valorado Álvaro Machado, abogado de la familia de Mauriz.
La sentencia condena al acusado a dos años de prisión por los delitos de homicidio por imprudencia y abandono del lugar del accidente. El hombre, que huyó a pie tras embestir a la víctima, dio positivo en el control de alcoholemia posterior a su detención.
El letrado considera que una pena de dos años resulta insuficiente para causas como esta: "Ninguna condena devolverá a Daniel, pero la justicia tiene que ser proporcional al menosprecio por la vida mostrado en los hechos probados". Es por eso, que la acusación había solicitado inicialmente cuatro años de cárcel.
Sin seguro
El condenado, un vecino de Sant Miquel de Fluvià de 25 años, conducía el coche de su pareja, con el consentimiento de esta, pero sin contar con el correspondiente seguro de responsabilidad civil.
A la entrada de Empuriabrava, sobre las 6 de la mañana del 10 de octubre de 2021, en una vía con limitación de velocidad de 50 km/h, aceleró progresivamente hasta llegar a los 78 km/h, ignorando presencia de Daniel Mauriz en el mismo carril, que conducía un patinete eléctrico. El acusado hizo caso omiso de la alarma acústica del sistema de seguridad del vehículo, que avisaba de la presencia de la víctima y activó la frenada automática, y siguió acelerando hasta embestir al fallecido, cuyo cuerpo proyectó a más de 18 metros de distancia.
Después del impacto, el conductor perdió el control del vehículo y colisionó con otros coches estacionados en la vía. Hora y media después del siniestro mortal, el padre del autor del crimen lo localizó y lo llevó a la comisaría, donde dio una tasa de alcohol de 0,40 mg/l en aire espirado.