Vista nocturna de Barcelona Barcelona
Así es el primer mapa global de contaminación lumínica de Cataluña: ¿cuál es la peor zona?
Ciudades como Badalona, Premià de Mar, Mataró, Lloret de Mar o Sant Feliu de Guíxols están en los rangos más altos
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Cataluña cuenta con el primer mapa global de contaminación lumínica. Con una resolución de un kilómetro, se ha generado esta cartografía con un modelo de predicción científica de alta precisión en el que se observa que las zonas más afectadas corresponden al litoral catalán, a las grandes ciudades y zonas industriales.
El trabajo desarrollado por el Institut d'estudis Espacials, con el apoyo del Institut de Cièncias del Cosmos de la Universitat de Barcelona (IUCCUB), estará disponible para su consulta pública en la web de la Conselleria de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica y, así, se podrán apreciar los espacios más afectados de la geografía catalana.
A través de un comunicado, el Departament traslada que este recurso supone una mejora para la evluación y gestión de este tipo de contaminación ambiental. Para ello, se calcula el brillo del cielo en el cenit en más de 32.000 puntos de la región mediante el trabajo de tres supercomputadores que cuentan con unas 600.000 horas de cálculo.
Página web donde está alojado el mapa de contaminación lumínica de Cataluña, disponible en la 'Conselleria' de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica
Zonas más y menos afectadas
Tal y como se aprecia en el mapa, las zonas con mayor contaminación se encuentran en el litoral. Especialmente, en la provincia de Barcelona. Ciudades como Badalona, Premià de Mar, Mataró, Lloret de Mar o Sant Feliu de Guíxols, todas ellas con presión turística. Además, en Tarragona destaca los alrededores de Cap de Salou o Vilanova i la Geltrú.
Por el contrario, aquellas localidades en las que el visitante podrá apreciar las constelaciones con mayor disfrute serán en los alrededores de Montsec, el Parque Natural de l'Alt Pirineu y el Nacional d'Aigüestortes y Estany de Sant Maurici. Espacios en los que, según señala la conselleria, se mantiene una calidad excelente.
A partir de esta cartografía, se tendrá en cuenta para hacer cambios de la iluminación pública, nuevos desarrollos urbanísticos o la aplicación de determinadas políticas de protección de los ecosistemas nocturnos.
Transició Ecològica tiene previsto destinar hasta el 2028 más de nueve millones de euros en otro proyecto para reducir el impacto ambiental del alumbrado exterior en espacios naturales especialmente sensibles a la contaminación lumínica.
