Josep Tabernero, jefe de Oncología del Hospital Vall d’Hebron y uno de los tres albaceas testamentarios del legado del empresario mecenas Pere Mir, se encuentra cada vez más cercado por la investigación judicial del caso Cellex.
Esta causa, que desde hace meses se instruye en el Juzgado de Instrucción 12 de Barcelona, pretende esclarecer el presunto expolio millonario de las fundaciones Cellex y Pere Mir, en una maniobra orquestada, según los investigadores, por Jordi Segarra, principal heredero y figura clave del entramado patrimonial.
"Era más que el doctor"
Ahora, y según ha podido saber Crónica Global, los investigadores de la Unidad Central contra el Blanqueo de Capitales han concluido que Tabernero no solo acompañaba a Mir en su etapa final como médico y amigo personal, sino que también asistía junto a Segarra a reuniones en las que se abordaban decisiones relevantes sobre la gestión de su patrimonio empresarial.
Es más, en varios documentos intervenidos durante los registros consta que “el albacea a cargo de las operaciones ordinarias será Jorge Segarra Pijuan o, en su defecto, D. Josep Tabernero”.
Asimismo, en el mismo informe se pone de manifiesto que Tabernero era conocedor de determinadas “particularidades de la gestión” que escapaban a su papel como facultativo, y que lo situaban en una posición de conocimiento respecto al funcionamiento interno del patrimonio del empresario.
Josep Tabernero, director del VHIO, en una imagen anterior
Doctor, amigo, gestor y albacea
Un patrimonio que está vinculado a una decena de sociedades mercantiles con ramificaciones en Suiza, Panamá y Reino Unido, que fueron creadas inicialmente por Pere Mir y heredadas por Segarra.
Fuentes conocedoras del caso —no los Mossos— sostienen que este entramado internacional habría sido utilizado por Mir para ocultar fondos y defraudar a Hacienda, y que Tabernero podría haber tenido conocimiento de su funcionamiento. Extremo que sigue bajo investigación judicial.
Las casas de La Pleta, en Baqueira-Beret
En el marco de este procedimiento, la magistrada ha puesto el foco en múltiples operaciones sospechosas. Entre ellas, la donación a Tabernero y su esposa de un inmueble y varias plazas de aparcamiento en la exclusiva urbanización La Pleta de Baqueira-Beret, así como más de 300.000 euros transferidos desde la sociedad SIMEX SL, de la que el médico tenía poderes notariales.
Estas donaciones figuran entre las al menos 16 operaciones investigadas por Linage en una causa que, hasta la fecha, ha detectado un perjuicio económico estimado de al menos 6,2 millones de euros.
Hasta 16 operaciones irregulares
Las operaciones bajo lupa no se limitan a donaciones inmobiliarias. La investigación también ha identificado transferencias a cuentas personales, subidas salariales injustificadas, donaciones de joyas, y la concesión de pensiones vitalicias a familiares del empresario fallecido, que según las fuentes consultadas habrían servido para “comprar el silencio” de herederos incómodos.
Todas estas actuaciones apuntan a un patrón sistemático de desvío de fondos desde el núcleo de las fundaciones hacia personas físicas del entorno de Mir.
Pere Mir
Justicia tuvo que intervenir
La causa se inició a raíz de una denuncia presentada por Àngel Surroca, antiguo colaborador de Pere Mir en Derivados Forestales. Surroca ya había plasmado sus sospechas en el libro De la fusta a la fusta. La historia del grupo Derivados Forestales (1942-2006), antes de trasladarlas al ámbito penal.
A partir de ahí, la juez Linage adoptó las primeras medidas cautelares: destituyó al patronato conjunto y ordenó el pasado 16 de abril la detención de Segarra, Tabernero y Juan Francisco Capellas (el tercero de los albaceas).
A los tres se les atribuyen presuntos delitos de administración desleal y apropiación indebida, al haber actuado “persiguiendo beneficios propios o de terceros, reteniendo o desviando recursos que debían haberse destinado a las fundaciones”.
En paralelo, la instructora ordenó al Departamento de Justicia de la Generalitat, a través del Servicio de Supervisión y Protectorado de Fundaciones, que asumiera el control de las fundaciones Cellex y Mir Puig. En este contexto, fue designado como administrador judicial Alberto Martínez Lacambra, director general del centro tecnológico del Notariado, quien ultima ahora un informe económico que será clave para determinar el alcance real del desfalco.
Embargan la casa de Segarra
Una de las últimas medidas cautelares adoptadas por la juez instructora fue prohibir la venta o cualquier modificación de las propiedades de Jordi Segarra, principal investigado en la causa.
La medida fue dictada el pasado 24 de abril mediante una interlocutoria que afecta tanto al piso como a la plaza de aparcamiento que el ya expatrono de las fundaciones Cellex y Mir Puig posee en la calle Raset 11-15 de Barcelona.
En la documentación a la que también tuvo acceso este medio consta la existencia de una hipoteca valorada en un millón y medio de euros, constituida en 2020 y a favor de SIMEX SL. Se trata de la misma sociedad que actuó como intermediaria en la donación de la exclusiva casa de La Pleta a Josep Tabernero.