Vista aérea del incendio en Torrefeta i Florejacs
Dos personas mueren en los incendios forestales de la provincia de Lleida
Nueve localidades han sido confinadas y más de 2.000 hectáreas calcinadas durante este martes
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Día trágico en la provincia de Lleida. Este martes, varios incendios han afectado las comarcas de la Segarra, la Noguera y, en menor medida, Urgell. Dos fuegos en Torrefeta i Florejacs y Sanaüja han causado la muerte de dos personas, halladas sin vida por los Bombers de la Generalitat cerca del núcleo de Coscó, en plena zona de extinción.
La propagación de los fuegos ha obligado a confinar nueve municipios, y ha acabado calcinando más de 2.000 hectáreas. En algunas zonas, como en Ribelles o Vilalta, las columnas de humo alcanzaron los 14.000 metros de altitud, generando una nube de fuego sin precedentes en Cataluña, según ha informado Protecció Civil.
Como informó Agents Rurals durante la mañana del martes, las tres comarcas afectadas, junto a otra veintena, tenían un alto riesgo de incendios. Estaban en el nivel 3 del Plan Alfa. Nivel que contempla una serie de restricciones: prohibe acudir a espacios naturales o hacer fuego.
Mapa del Plan Alfa del 1 de julio, elaborado por Agents Rurals
Confinamientos
Durante el martes, las autoridades ordenaron el confinamiento de Artesa de Segre, Pons, Agramunt —la única en Urgell—, Guissona, Oliola, Sanaüja y Torrefeta, además de Cabanabona y Vilalta. En total, se activaron medidas de confinamiento sobre una superficie de 25.512 hectáreas.
En Vilalta, los servicios de emergencia evacuaron a una persona con movilidad reducida. Desde Guissona, el alcalde Jaume Ars alertó de posibles evacuaciones adicionales en masías aisladas, debido al humo, la escasa visibilidad y el comportamiento errático del fuego.
Continuem treballant en els incendis de vegetació actius a #IVTorrefeta i #IVSanaüja, on hem apagat una masia deshabitada.
— Bombers (@bomberscat) July 1, 2025
📹 Imatges de les 19.18 hores a #IVTorrefeta.#bomberscat pic.twitter.com/vTpNOZ3PPo
Más de 1.800 hectáreas afectadas
Las autoridades declararon el incendio de Torrefeta i Florejacs a las 17:08. Finalmente, ha calcinado 1.830 hectáreas, la mayoría en el Espai Natural Protegit Valls del Sió-Llobregós. A las 22:37 fue estabilizado, después de un avance extremadamente violento, condicionado por tormentas próximas con ráfagas de viento de hasta 125 km/h.
El fuego de Sanaüja, declarado a las 14:30, fue inicialmente contenido. Pero se reactivó con fuerza. A última hora del martes, quedó prácticamente controlado, lo que permitió desactivar todos los confinamientos activos a las 23:11.
Avisos por tiempo violento
El Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) ha emitido avisos por tiempo violento en comarcas como el Pallars Jussà, y mantiene la alerta de riesgo extremo de incendio en la Noguera y el Alt Urgell. Las condiciones de calor, viento y acumulación de vegetación seca están generando focos secundarios impredecibles.
Los Bombers han establecido un centro de mando en Torrefeta para coordinar el operativo, que sigue activo. Los Agents Rurals han abierto una investigación para esclarecer el origen de ambos incendios.
Imagen del incendio en Sanaüja
Primeras reacciones institucionales
El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, se ha mostrado “consternado” por la muerte de las dos personas. En un mensaje en X, ha trasladado su pésame a las familias y ha pedido “mucha prudencia y seguir todas las indicaciones de los servicios de emergencia”.
Consternat després de conèixer la mort de dues persones a conseqüència de l’incendi a la Segarra. El meu sentit condol als seus familiars.
— Salvador Illa Roca (@salvadorilla) July 1, 2025
Demano molta prudència i seguir totes les indicacions i recomanacions dels serveis d’@emergenciescat a totes aquelles zones afectades.
Por su parte, la consellera de Interior, Núria Parlon, ha calificado el incendio de “extremo y muy complejo”, asegurando que en varios momentos ha superado la capacidad de extinción de los Bombers. También ha expresado su “sentido pésame a los familiares” de las víctimas.
Acabem la reunió d’actualització del Pla d’Acció d’Intervenció de @bomberscat a l’incendi de la Segarra. Un incendi extrem i molt complexe que ha superat la capacitat d’extinció dels bombers en diferents moments. A hores d’ara està estabilitzat. Malauradament ens ha deixat… pic.twitter.com/qXpTd4R5Yc
— Parlon #apeudecarrer #interioriseguretatpública (@nuriaparlon) July 2, 2025
Los últimos incendios en la provincia de Lleida
En los primeros días de la campaña forestal, la provincia de Lleida ya registró varios incendios también de magnitud, aunque sin víctimas mortales.
El más grave hasta este martes fue el de Granyena de Segarra, iniciado el pasado 21 de junio en un vehículo, junto a campos de cereal sin cosechar. El fuego arrasó entre 410 y 473 hectáreas, incluyendo cultivos y zonas forestales.
Vista aérea del reciente incendio en Granyena de Segarra
Este incendio obligó al confinamiento preventivo de unas 10.000 personas en localidades como Cervera, Granyanella, La Curullada y Fonolleres.
Se desplegaron más de 90 dotaciones terrestres, 12 aéreas y unos 300 efectivos, incluyendo medios agrícolas aportados por los propios vecinos. El fuego fue finalmente controlado la mañana del domingo 22.
Ese mismo fin de semana también se produjeron otros dos incendios. Uno de ellos en el término de Pinell de Solsonès–Torrefeta i Florejacs: afectó unas 27 hectáreas, y se habría producido por una sobrecarga eléctrica. El otro, en Oliola, calcinó cerca de 189 hectáreas y requirió un amplio operativo para evitar su propagación.
El último incendio significativo hasta este martes tuvo lugar este lunes 30 de junio en Puigcercós. Quemó unas 30 hectáreas de vegetación, y se desplegaron hasta 40 dotaciones, entre medios terrestres y aéreos. El fuego fue dado por controlado durante la madrugada, pero permanece en fase de vigilancia, con 14 unidades aún activas en la zona.
Un bombero, en Mas de Melons-Alfés
Precedentes de víctimas mortales en incendios en Lleida
Los incendios forestales en Lleida han dejado víctimas mortales en otras ocasiones. En julio de 2009, un hombre de 86 años murió asfixiado dentro de su coche en Cabanabona, rodeado por un gran fuego que arrasó más de 5.000 hectáreas entre esta localidad, Agramunt y Oliola.
En agosto de 2003, un joven auxiliar forestal de 22 años falleció en el Segrià cuando el vehículo en el que se dirigía a un incendio volcó. Ese mismo verano, una avioneta de extinción se estrelló en Navés, causando la muerte de sus dos tripulantes.
En caso de quedar atrapado con el coche rodeado por el fuego, la Dirección General de Tráfico (DGT) sugiere permanecer dentro del vehículo, con las ventanillas cerradas y las luces de emergencia encendidas.
El motivo de esto es que la carrocería del vehículo ofrece cierta protección frente al calor y al humo, en comparación con quedarse fuera y exponerse al fuego de pie. En el caso de tener que encarar el fuego, las autoridades recomiendan cubrirse bien, respirar a través de un paño húmedo y alejarse en dirección contraria al avance del fuego y el viento.
