La casa de colonias Can Xammar de l'Ametlla del Vallès, señalada este miércoles por un presunto caso de pederastia, apartó al monitor implicado el lunes, según han confirmado a Crónica Global los responsables de la Fundació Roser de Maig, entidad sin ánimo de lucro que la gestiona las instalaciones.
Se trata de un chico joven que había elegido esta ubicación para realizar las prácticas obligatorias para obtener la titulación de monitor de ocio y tiempo libre y que, informa la fundación, no ha vuelto a trabajar con ellos tras los hechos, ocurridos en la penúltima semana de mayo. Después del incidente que ahora investigan los Mossos d'Esquadra, la casa estuvo vacía una semana, por lo que el monitor no habría tenido contacto con menores. Este lunes, al tener conocimiento de la denuncia, la entidad habría anulado convenio laboral.
Desde Roser de Maig aseguran haberse puesto "a plena disposición" de los investigadores para esclarecer lo sucedido en su casa de colonias, a raíz de una denuncia de varios padres de la escuela pública El Bruc, en Riells i Viabrea, cuyos hijos habrían sido fotografiados desnudos por el monitor en cuestión.
"No supo poner el límite"
Los responsables de la casa de colonias han reconocido a este medio que es cierto que "un niño terminó desnudo", aunque defienden que las circunstancias en que esto pasó difieren de un presunto caso de pederastia. Según su versión, "el monitor no supo poner el límite" cuando algunos menores empezaron a quitarse ropa durante un juego, lo que provocó que uno de ellos se desvistiera por completo ante la presencia del adulto.
Interior de una habitación en Can Xammar, la casa de colonias señalada por un presunto caso de pederastia
Desde la fundación responsable han marcado distancia con el monitor señalado y han subrayado que no se trataba de una persona de su confianza directa, puesto que era su primer día de prácticas.
Denuncia de los padres
Los Mossos d'Esquadra recibieron la denuncia por parte de los padres de los menores afectados por el caso este mismo lunes. En ella se describe que un monitor de Can Xammar habría separado del grupo a varios alumnos de primaria y les habría convencido para realizarles una serie de fotos desnudos como parte de un juego.
Detallan que una profesora del centro habría visto la dinámica y le habría puesto fin sin comunicarlo a las familias, ni que se produjeran mayores consecuencias. Así, fueron los propios menores quienes informaron a sus progenitores, mientras el centro educativo se habría quedado al margen.
En los primeros días de investigación, los agentes policiales no descartan que pueda haber más víctimas para este caso que ha causado la dimisión del director del colegio, Cinto Franco, que ha comunicado su decisión a las familias a través de un correo electrónico, sin dar explicaciones de los motivos de la renuncia.