El pantano de Sau, en una imagen de archivo
Cataluña levanta las restricciones al uso del agua: "Volvemos a la normalidad tras la peor sequía en 200 años"
La 'consellera' Sílvia Paneque anuncia el fin de la alerta en el sistema Ter-Llobregat, que abastece a más de seis millones de vecinos de Barcelona y gran parte de Girona
Más información: Los pantanos han recuperado las reservas de diciembre de 2021 gracias a las lluvias acumuladas
La Generalitat de Cataluña levanta las restricciones al uso del agua en el sistema Ter-Llobregat, que abastece a la totalidad de Barcelona y gran parte de Girona. Sus más de seis millones de vecinos, negocios e industrias ven cómo la mayor parte de la red de las cuencas internas abandona la alerta por sequía para avanzar al nivel de prealerta.
La consellera de Territorio, Sílvia Paneque, ha anunciado este sábado desde el icónico pantano de Sau el fin de las limitaciones para la mayor parte de la comunidad, después de que el comité permanente de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) trasladara a su equipo la propuesta de "desescalada" el pasado viernes.
En una atención a los medios, la dirigente socialista ha celebrado que Cataluña se sobreponga al "periodo más grande de sequía de los últimos 200 años", tras 56 meses con unas lluvias inferiores a la media de la región. Aunque no lo ha presentado como el fin definitivo de la sequía --situación que llegará cuando Cataluña deje de "depender" de las lluvias--, sí ha hablado de "vuelta a la normalidad".
La 'consellera' Sílvia Paneque, en su visita a una infraestructura hídrica (imagen de archivo)
Los pantanos recuperan las reservas de 2021
El Govern del expresident Pere Aragonès activó en septiembre de 2021 el plan especial por la sequía por el aumento progresivo de la aportación de agua desalinizada y regenerada a la red. En marzo de 2024 --hoy hace un año--, los embalses catalanes llegaron a caer por debajo del 15%.
Hoy, las reservas han remontado hasta el 64% gracias a las lluvias, sobre todo a las de marzo. En sólo un mes, los pantanos han visto doblar el agua embalsada, partiendo del 31% registrado hace 30 y escasos días. Los embalses no estaban tan llenos desde diciembre de 2021, ha recordado la consellera.
Imagen de archivo del pantano de Sau
"Más de 230 hectómetros cúbicos [hm3] que irán en aumento en los próximos días porque aún baja agua de los ríos", en palabras Paneque. Las precipitaciones han beneficiado sobre todo a La Baells, Sau y Darnius Boadella; también lo han hecho en menor medida al sur, con Siurana y Riudecanyes.
Además, la región se encuentra a la espera de conocer la aportación del deshielo de las últimas nevadas.
Desescalada también en las zonas más secas
El comité permanente de la sequía de la empresa pública que gestiona los recursos hídricos en Cataluña también ha propuesto que el acuífero del Baix Ter vuelva al escenario de normalidad, y que el mermado Fluvià Muga pase de excepcionalidad a alerta.
Con estos cambios, de las 18 unidades de explotación de las cuencas internas, 14 de ellas están en normalidad o prealerta, es decir, libres de limitaciones.
Depuradora de Figueres (Girona)
Vuelta a la normalidad: ¿qué restricciones decaen?
Las restricciones previstas por la fase de alerta --y que hoy decaen-- reducían el riego agrícola en un 25% y el consumo de la industria en un 5%. También prohibían el llenado de fuentes ornamentales, limitaban el llenado parcial de piscinas y reducían los caudales de los ríos, entre otras medidas.
Asimismo, el gasto máximo se situaba en los 250 litros de media por persona, una cifra muy por encima de la que realmente consume la población catalana, unos 173.
Imagen de un grifo de agua, el servicio que el Govern garantiza en Cataluña
Sin levantar el acelerador
La Generalitat mantendrá el ritmo inversor para que los recursos no convencionales --la desalinización y la regeneración-- cubran el 70% del consumo. Esto permitirá reducir la "dependencia" de las lluvias y que los embalses dejen de ser la fuente principal de agua para la ciudadanía.
Las obras por la potabilizadora de la Trinitat, en el río Besòs, acabarán en julio de este año, mientras se avanza en el aprovechamiento y construcción de pozos en Montcada, Sant Joan Despí y Peralada. 700 ayuntamientos también reparan ya las fugas de agua de su red gracias a una línea de ayudas de 130 millones de euros, y se espera la ejecución de las obras de emergencia en las cuencas de Montsant, Siurana y Riudecanyes.
La planta potabilizadora del Besòs triplicará su capacidad de producción de agua potable
Los 100 millones de euros movilizados este 2025 permitirán añadir 31 hm3 --miles de millones de litros-- a la red antes de finalizar el año; en 2026 y 2027, serán 68 hm3 adicionales; y entre 2028 y 2029, se construirá la desalinizadora proyectada en Foix. ¿El resultado? "En 2030, dispondremos ya de 280 hm3 de nuevos recursos que alejarán a Cataluña de la sequía", en palabras de Paneque.
