
Fotomontaje de un agente de Mossos ante una nave de plantación de marihuana
'Narcos' reincidentes: albaneses con antecedentes por tráfico de marihuana caen de nuevo en Cataluña
Se trata de una presunta organización criminal cuyos miembros ya fueron detenidos en 2021 por hechos de la misma naturaleza criminal
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En Cataluña, la mafia albanesa ha logrado consolidarse como el principal actor en el negocio ilegal de la marihuana. Decenas de clanes, algunos aliados, otros en conflicto, han ido expandiendo sus actividades a lo largo de todo el territorio catalán.
En naves industriales, pisos, locales y chalets, cualquier espacio disponible se convierte en una nueva oportunidad de negocio para estas organizaciones criminales.
Es el caso de los miembros de un entramado que, recientemente, ha sido desarticulado por los agentes de la Unidad Territorial de Investigación de la Región Metropolitana Sud de Mossos d'Esquadra, en el marco del operativo policial 'Trifásico'.
13 detenidos, incluido el 'capo'
En total, 13 personas quedaron detenidas, incluidos los 'jardineros' de las plantaciones, los cargos intermediarios, un testaferro y el cabecilla de la organización.
Este último, según ha podido saber Crónica Global, llegó a contratar un matrimonio por conveniencia con una ciudadana española para obtener la residencia y operar con mayor impunidad.
No es la primera vez que los detenidos se enfrentan a cargos similares. De hecho, según el subinspector Óscar Durán, jefe de la Unidad Territorial de Investigación, algunos de los arrestados ya habían sido detenidos en 2021 por actividades relacionadas con el cultivo y tráfico de marihuana. Lo que sugiere que llevan años operando en el negocio ilícito del 'oro verde' en Cataluña.

Una plantación interior de marihuana localizada por los Mossos d'Esquadra EUROPA PRESS
Tres plantaciones nuevas
Según el subinspector Durán, la operación policial ha sido un golpe decisivo contra una de las presuntas células criminales más activas en la región, conocida por su capacidad para establecer nuevas plantaciones con rapidez.
En esta ocasión, se han desmantelado tres nuevos cultivos: uno en Santa Coloma de Cervelló, otro en Granollers y uno más en una finca en Vallirana.
Ésta última era propiedad de un individuo de origen español, que actuaba dando cobertura a la organización, y era responsable de hacer de intermediario entre el testaferro, encargado de los pagos de alquiler de las naves, y el líder del grupo.
Seis meses de vigilancias
La investigación comenzó hace seis meses, cuando los agentes detectaron un consumo eléctrico anómalo en una nave en Santa Coloma de Cervelló (Barcelona). Este indicio inicial llevó a los Mossos a sospechar de actividades ilícitas en el interior del local.
A partir de allí, se abrieron diligencias y se iniciaron vigilancias sobre las personas que frecuentaban la nave, lo que permitió descubrir posibles conexiones con otros dos locales, uno en Granollers y otro en Vallirana.
En ambos lugares también se registraron altos consumos de electricidad, lo que reforzó la sospecha de actividades ilegales.
13 detenidos y 4 armas
Durante las investigaciones, se identificaron a varios miembros clave de la red, todos de origen albanés, incluidos los responsables de las plantaciones. Con toda esta información, el Grupo de Estupefacientes de la Unidad Territorial de Investigación de la Metropolitana Sud llevó a cabo la fase final de la operación.
Así fue como el pasado 11 de marzo se ejecutó el dispositivo policial que incluyó siete entradas y registros en diversas localidades catalanas: Vallirana, Santa Coloma de Cervelló, Granollers, Santa Coloma de Gramenet, Barcelona y L'Hospitalet de Llobregat.
Como resultado, se arrestaron a 13 personas y se decomisaron 5.000 plantas de marihuana. Además, los agentes intervinieron, en casa del intermediario español, cuatro armas de fuego, un hallazgo cada vez más frecuente, ya que las organizaciones criminales de este tipo suelen estar armadas.

Armas incautadas durante el dispositivo 'Trifàssic'
Nueve de los detenidos ingresaron en prisión tras declarar ante el Juzgado de Instrucción 2 de Sant Boi.
Habla el abogado
Sin embargo, como en toda historia, existen varias versiones. Álvaro Machado, abogado del despacho Vosseler, representa a varios de los detenidos, entre ellos al que los agentes han bautizado como el cabecilla.
Lejos de compartir la opinión de los investigadores, el letrado considera que, seguramente por falta de tiempo, se trata de una investigación "exprés" lo que, a su parecer, "se traduce en investigaciones precarias, realizadas rápida y aceleradamente".
Bajo su criterio, este tipo de investigaciones "vulneran de forma frecuente los derechos de las personas investigadas donde, como en este caso, se asegura que una persona es cabecilla de una organización basándose en dos fotografías tomadas en un seguimiento", zanja.